TEQUILA LEMONADE

Parte 3 "BOOGIE-BOOGIE"

BOOGIE BOOGIE

Charly es un tipo un tanto complejo. Así como a Smog, lo conozco desde que eramos niños. Sin embargo al igual que Bob, éste también vive en un "núcleo familiar". Recuerdo que jugábamos en la calle futbol. Por mi parte yo hacía mi mejor intento; no sabía las reglas, solo sabía que esa pelota debía entrar por aquel umbral. Cuando uno tiene el ejemplo, la guía, por simple cultura, uno adopta paradigmas, alguien te prepara para enfrentar los retos que tiene la vida. En ese aspecto me sentía y aún me siento incompleto. Porque realmente no sabía nada. Y si hay algo que me molesta es la indolencia o el egoísmo, de quien en un equipo ni ayuda, ni deja que lo ayuden. Definitivamente yo necesitaba mucha instrucción. Pero es que la diligencia es parte de la educación y formación humana de un individuo, lamentablemente me faltaba esa otra pieza. De niño yo no comprendía de juegos, hoy no comprendo casi nada del amor. ¿Será un empate?, la verdad es que con mi madre tampoco tuve mucha comunicación. Lo demás lo he aprendido por inercia o a la fuerza, ya sea centrifuga o centrípeta. Solo una vez toqué el tema con Smog, justamente en casa de Bob, una reunión algo extraña. Llena de sentimientos; no sé en que terminó aquello, por el alcohol; nadie ha dicho nada al respecto. No comprendo muy bien las relaciones, soy algo así como un pescador, "Catch and Release", pero eso no significa que las presas no se vallan heridas; el anzuelo del amor hiere desde el principio, para ambas partes o una de las dos; tengo mis dudas. Por eso prefiero el trabajo, donde busco aplicar lo que he aprendido y procuro ayudar. Vamos, si una pieza falla, fallamos todos, ¿no?. Simple sentido común. Charly siempre me entendió, aunque a su modo. Y yo lo comprendo al mío. Nos conocemos bien, simple y llanamente, no como Bob, definitivamente hay cosas que desconocemos de nuestros muy personales pasados.

Charly - ¿Qué pasa? Anímense, vamos a bailar.-

Bob - Me lo pensaré un poco más amigo...-

Charly - Si lo piensas mucho; ¡es que no!. Pero tú querías fiesta ¿verdad?...

Valery - !Touche! 

Maray Jane - ¡Bien dicho amigo! Para eso vinimos; ¡a disfrutar!... 

Ya estaba ebrio. Y cuando se pone ebrio, o se duerme, o se pone muy inhibido. Al grado de verse simpático; hasta que azota. Como aquella vez. Estábamos en bar, muy bien acompañados, por cierto. Resulta que Charly así como los demás querían ligar con unas chicas. Yo solo me limitaba a beber. No es que tenga que tener algo que ver con cada mujer que conozco. Tengo algo así como un censor y un switch, que al detectar peligro se activa la alarma y corro a cortar la corriente. Soy un tanto precavido, me gusta el riesgo, pero no significa que tenga que sufrir; como ahora. Cuando alguien sale de mi corazón, no vuelve a entrar, al menos no como ellas esperan, lo mismo me pasa con la amistad. O somos, o no somos, nada a medias. Pero hay gente que entra con los dos pies y se hunde hasta la barbilla.

Charly - Venga vamos, no sean miedosos...-

Bob - Soy yo, o éste compadre ya esta ebrio...-

 - ... -

Era más que evidente, ya tenía unas copas encima cuando pasamos por él. En ese momento, Mary Jane, quien le tiene estima, lo invita a la pista. Él no se negó y es ahora que inicia el show.

Al abrir la pista con un ritmo muy peculiar, mi amigo comenzó a destilar movimientos que ni él mismo sabía que podía hacer. Ojalá que esa falta de pena al hacer las cosas, fuera natural. Uno no sabe de lo que es capaz, hasta que llega a ciertas condiciones. O cuando nos llevan al límite. Mary Jane definitivamente es una bruja. Conoce los hechizos perfectos para lograr extraer ese algo de alguien, de formas misteriosas. Valery lo sabía, era como si en aquellas platicas intensas, aprendimos a conocer más a esta mujer. Mientras yo me alejaba, ella se enamoraba.