–Buenas noches. –dijeron todos a la vez.
–Buenas noches. –contestaron Amil, Noa y Yan a la vez.
Noa cogió a Dani y se fue junto a todos los demás, haciendo amistad con todos, sonriente y feliz.
Amil, mientras tanto, abrió una botella de champán y cuando iba a beber, alguien le quitó la copa.
–El alcohol es malo para el embarazo.
–Sé que no quieres al bebé, Antoine. No voy a obligarte a verlos, ni a nada. Solo te pido que me dejes en paz.
–Ven con todos. No te quedes aquí sola.
Antoine entrelazó sus dedos con los de Amil.
–Me voy a hacer cargo de los bebés. Lo he dejado con Erika.
Amil miró sorprendida al rubio. Antoine se acercó y besó los labios de Amil.
Una pierna impactó en el muslo de Antoine.
–Le has hecho mucho daño, Antoine. –dijo Noa enfadada.
–Necesito otra oportunidad. –imploró Antoine.
–La última. –amenazó Noa.
La mano de Antoine se coló bajo la camiseta de Amil y acarició su vientre, causando que Amil se estremeciera y el chico besara su cabeza.
–Cris, Isa, chicos. Ella es Amil, nuestra hermana. –dijo Saúl.
–Encantada. –Amil sonrió.
Después de cenar, todos se sentaron en los sofás. Antoine metió su mano por la camiseta de Amil y le acarició el vientre, haciendo que Amil se relajara y se apoyara en el pecho de Anto cerrando los ojos.
–No te duermas, pequeña. –susurró Antoine en el oido de la chica.
Amil sonrió y abrió los ojos. El reloj dio las 12 y Yan apagó las luces y se fue a la cocina.
Volvió con una tarta llena de velas.
–Feliz cumpleaños, pequeña. –dijo besando a Noa.
–Eh, eh. Es MI pequeña, Yan. No confundamos conceptos. –dijo Amil fulminandolo con la mirada.
Todos rieron pero Yan negó.
–Creo que eso va a cambiar. Lo siento. –se dirigió a Noa. –Se que nos conocemos desde hace poco, pero se que eres la mujer de mi vida, y espero ser el hombre de la tuya. Te quiero mucho. –Yan se arrodilló. –Noa. ¿Quieres casarte conmigo y ser mi pequeña?
Noa estaba en shock pero se tiró hacia él asintiendo y le besó poco inocentemente.
Yan volvió a la cocina y Amil fue tras él.
–No le hagas daño por favor y cuídala. Tienes mi aprobación de cuñada.
Yan abrazó a Amil y ambos volvieron al salón con los platos para comer la tarta.
(...)
–Mañana podré vacilar mucho a Noa. –le dije a Antoine, que estaba tumbado a mi lado y tenía a Dani en su pecho.
–¿Por qué?
–Porque decía que iba a ser virgen hasta el matrimonio.
Antoine rió.
–Sois muy diferentes, entonces.
Amil bajó la cabeza y Antoine fue consciente de que había metido la pata.
–Lo siento.
–Déjalo. Buenas noches. –Amil le dio la espalda.
Antoine se levantó y dejo a Dani en su habitación. Al volver, escuchó a Yan y a Noa. Hizo una mueca y entró de nuevo a la habitación de Amil.
–Siento mucho todo lo que has sufrido por mi culpa. Te lo compensaré, lo prometo.
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Frozen love
FanfictionLa torpeza de ella hizo que se juntaran. La de él, que se reencontraran. En ambas, el hielo estuvo presente. El ambiente era frío, pero sus corazones calientes.