Vida Típica [CORRIGIENDO]

hospital

*Narra Calep

Desperté sintiéndome mucho mejor, el dolor se había ido, estaba solo en el cuarto hasta que Holden entro.

— ¡Bebe despertaste!

—SI.

— ¿Ya estas mejor?

—Sí, mucho mejor, ¿Te quedaste toda la noche en el hospital?

—La verdad ni siquiera salí de la habitación, estuve dormido en esta silla.

Wow, creo que cada día que pasaba me daba cuenta cuanto me quería Holden, era muy lindo, algo que jamás me había pasado.

—Muchas gracias por cuidarme.

—No tienes nada que agradecer. —Después de decir esto me beso —Te amo Calep.

—Yo te amo más Holden.

Luego de esto el doctor me llamo para hacerme una revisión, quería comprobar que todo estuviera bien, después de la revisión y de comprobar que todo estuviera en orden pude salir del hospital.

— ¿Ya nos vamos a casa verdad? —Dije deseando salir ya de ahí.

—Si Calep ya nos vamos —Dijo mi padre.

—Calep —Hablo esta ves mi hermana —Tengo que hablar con tigo un segundo.

—Muy bien, ustedes vallan al carro ya los alcanzamos —Dije.

—Calep escucha, yo… estuve en la noche con tigo y en ciertas ocasiones mencionaste a Julio.

— ¿Qué?, ¿Pero que estas diciendo? ¡Yo no dije nada! —Interrumpí a mi hermana exaltado — ¡Dejemos esto por la paz! —Mi hermana mi miro preocupada y no se dijo nada más.

Caminamos al carro y no se dijo una sola palabra por parte de ninguno, al subir yo me subí del lado y mi hermana del otro, de tal forma que Holden quedaba en medio de ambos. Mi padre condujo a la casa y cuando llegamos ya eran las diez de la mañana, entonces pensé — ¡La escuela! —Pero luego recordé que era sábado, aunque según yo algo tenía que hacer este día…

—Calep, ¿estás bien? —Dijo Holden.

—Sí, ¿Por qué lo preguntas?

—Te noto muy distante, en el camino no dijiste nada.

—Es que estaba pensando en unas cosas, estoy seguro que hoy tenía un pendiente, pero no recuerdo cual era.

—Olvídate de eso, pasaste dos días duros en el hospital, que te parece si nos duchamos y vamos a comer ¿Está bien?

—Muy bien.

Al entrar a la ducha con Holden me sentía relajado, nos lavamos mutuamente el cuerpo, sin siquiera mirarnos fijamente, podía sentir su calor en mi piel cada vez que me tocaba, podía sentir cada uno de sus latidos, no soporte más y lo bese, nos besamos, terminamos de ducharnos y Holden me seco, yo realicé lo mismo con él, decidimos vestirnos de la misma manera, ambos con una playera blanca, jeans azules y nuestros converse negros