azul solo tiene dos cosas que ama en su vida. A su abuelo y su trabajo en un hotel.
Es chef pero no profecional y cuando la despiden de su empleo ella busca lo que tanto anela. Ser una increible y profecional chef. Pero eso no le sera nada sensillo...
-llegarás tarde a tu propia apertura... Vamos bebé.
-ya estoy lista
Dijo saliendo de la habitación.
Estaba muy hermosa con su vestido corto color rosa.
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Me acerco a ella y la abrazo por la cintura.
-valió la pena esperar..
-¿me veo bien?.
Le sonrió y recuerdo esa vieja canción.
-Si. Estas maravillosa hoy
Canto cerca de su oído. Veo como Azul se sonroja.
-tonto. Mejor vámonos.
Cierro la puerta de la casa de campo ya que ahora vivimos acá por una razón en específico.
Ahí al lado del auto está el abuelo de Azul y "ese tipo".
Este sujeto apareció en nuestra vida hace mas de un año y medio y mira a mi chica como si fuera el amor de su vida. Cree que ella es de su propiedad cuando azul es mía.
-escúchame tú... Quiero que tengas bien en claro esto.. Ella..
Dije señalando a Azul mientras hablaba con el.
-Ella es mía. Mía. ¿Entendido?.
-no.
Dijo desafiante. Lo reconozco. Es apuesto y su mirada es traviesa. Y en el fondo me recuerda un poco a mi.
-es MÍA.
-no... Mami mía.
-ya deja a Alan tranquilo. Ven amor.
Ella lo tomó en brazos y el tipo ese me saco su lengua.
-te das cuenta. El es quien empieza.
-Alejandro. Deja a tu hijo en paz.
Me amenazó Azul.
Me acerco a Alan y el extiende sus bracitos para que yo lo alze.
-ven pequeño. Tu madre no entiende nuestra rivalidad por su amor.
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