SAMANTHA OCT

26 Octubre 2017

Para los amantes de la luna como yo era un maldito placer tener insomnio y observar la luna a las 3:00 en el balcón de mi nuevo apartamento.
Me desperté a las 7 de la mañana, estoy esperando un mensaje importante.
No llega, han pasado 3 horas, y sigue sin llegar, fui por un plato de cereal, me lo comí acostada en la cama, escuché Call me de Blondie y seguí esperando.
No se de quien es el mensaje, solo sé que es para mi, tampoco se que va a decir, solo se que es importante, no se nada, pero me tengo que mover de aquí, me metí el celular en la bolsa de mi pijama y me puse a hacer el aseo, tendí mi cama, lave trastes, barrí, hice todo y me metí a bañar, puse el teléfono en el mueble del lavamanos y le subí todo el volumen, me bañe y cuando salí lo revise, vi que tenía un mensaje nuevo de un número desconocido. Decía, "puedes cambiar tu vida, dejando el pasado atras, quiero que estés bien, desahogate y liberate de todo lo malo que te rodea en la mente".
Y pense, -Wow que intenso, es absurdo. Pero me detuve e imaginé quién, cómo y por qué. Por qué sabía que llegaría un mensaje ese día, cómo pude presentir eso.
No quiero decir nada, ese mensaje me dejo pensando todo el día, ¿cómo sabía que me iba a llegar un mensaje? ¿cómo sabía que es importante? ¿cómo? ¿en qué momento? ¿soy adivina? ¿bruja? ¿qué demonios ocurre? Por un momento me puse a pensar que el mensaje era un tanto similar a lo que le dice Rafiki a Simba en el rey León. Ya estaba delirando.
Esta bien, esta bien, voy a dejar de cuestionarme y me voy a calmar, tal vez deba de hacerle caso al mensaje, tal vez solo deba darle el avión, pero no puedo dejar de pensar en eso ¿quién me lo mando? ¿para qué? Empiezo a creer que es alguien que conozco, porque una persona equis no hubiera escrito "quiero que estés bien". No pienso investigar nada en lo absoluto, no me importa ni me interesa.
Me salí del baño y me dirigí al vestidor, me puse mi vestido favorito, negro, como la noche, me arregle y me salí de la casa, camine todo el día, me compre un elote, comí en un restaurante pequeño y regrese a casa, arregle cosas que me faltaban; eran fotos, puse una repisa y las coloqué ahí, eran muchísimas fotos, ni se en que momento saque tantas, otras las puse en la pared, todas dispersas por toda la casa, como obra de arte surrealista o abstracta. En verdad todo el día estuve abrumada por el mensaje.