Capítulo 3.

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El demonio ocultó la ropa de su Estrella y se puso los pantalones rápido para contestar la llamada.

-Tom, al fin, -apareció Marco en la habitación de la rubia- oye ¿has visto a Star? Me tiene un pelín preocupado.

Su ex-novio sabía como era ella, ahora tan solo él podía ayudarle, claro que aprovecharía aquello para sacar información.

-¿Qué ha pasado? -preguntó desconcertado.

-Bueno es algo privado -intentó no hablar del tema.

-Marco como mínimo cuéntame algo, salí con ella y la conozco mejor, si no tengo idea de lo ocurrido ¿cómo quieres que ayude?

-No me fío pero está bien, solo te digo por encima ¿vale? -desconfiado.

-A mi me gusta alguien y Star lo sabe, ayer intenté dejar las cosas claras entre nosotros pero hoy todo ha cambiado. Es algo complejo Tom.

El chico pelirosa encajó algunas piezas enseguida, ahora Star estaba dolida porque Marco había elegido a la otra persona y él aprovecharía esa oportunidad para recuperarla.

-Pues según me cuentas seguramente necesite unos días a solas, me imagino por lo que estará pasando y no es fácil, tienes que darla tiempo para aclararse -fue sincero pero sin especificar demasiado.

-¿A qué te refieres? Yo solo quiero que seamos amigos.

Aquello fue escuchado perfectamente por la princesa quien se había quedado detrás de esa pared y sus lágrimas volvieron a recorrer esas mejillas que tanto gustaban al demonio.

-Bueno gracias por la ayuda...creo.

Marco colgó y Tom al escuchar los sollozos de ella fue a consolarla.

-Me tienes a mi Star, no llores -la abrazó con ternura.

-T-Tom -entrecortada por el llanto.

La joven abrazó a su ex-novio, este siempre estaba ahí desde su ruptura con esperanzas de volver, ella lo sabía pero estaba enamorada de Marco y que su amor no quisiera saber nada suyo la dolía mucho, ambos tenían una historia pero él no se daba cuenta, ni siquiera la tuvo en cuenta cuando eligió a Jackie quién era su amor desde la infancia. Todo unido a que estaba con su ex-novio hacía sentirse confundida ¿empezaba a fijarse en él porque sentía algo o era el hecho de que Marco la hubiera rechazo?

-¿En qué piensas? -preguntó el diablo calmado.

-En todo lo ocurrido.

Quizás era demasiado pronto para lanzarse, debía saber que estaba sintiendo por cada uno y aclararse.

-Oye si quieres puedes quedarte aquí conmigo ¿qué te parece?

-¿E-En serio? -abrió los ojos sorprendida.

Él asintió.

-No importa que seas mi ex, quiero cuidarte porque eres alguien muy importante para mí.

-Muchas gracias Tom -abrazó al demonio.

Aquel chico que se hacía llamar su mejor amigo no sabía lo que había perdido, claro estaba el hecho de que su ex-novio haría todo lo posible por reconquistarla aún si tenía muy poco tiempo. La joven paró de llorar cuando estuvo más calmada y ambos fueron a desayunar.

-¿Qué tal has dormido? -susurró ella.

-Mejor que nunca ¿y tú?

-Igual jeje.

Ambos sonrieron, Tom estaba demostrando ser un caballero con ella, durante el desayuno le contó algunas cosas de las dimensiones a donde había ido ella sola. Parecía una plática de amigos que no se veían en mucho tiempo y los jóvenes se encontraban realmente a gusto así.

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