*Punto de vista de Victoria*
Estaba lloviendo en la calle. Después de la pelea con Berta estaba demasiado caliente. Luis hizo que le pegara un par de puñetazos en el estomago para relajarme, obviamente mis golpes no le hacían nada.
Luis: ¿Estas mejor?
Victoria: Eso creo… Pero es que esa zorra.. –Me alejé un poco de el, entonces me cogió las manos y empezamos a bailar.
Luis: Ven aquí princesa! – Nos besamos, no pude evitar sonreír. –
Ya nos habíamos mojado bastante haciendo el tonto bajo la lluvia, asi que fuimos a buscar el coche de Luís. Cuando ya nos habíamos puesto en marcha, nos encontramos un accidente en una rotonda. Un policía nos paró y picó en mi ventanilla.
Policia 1: Hola señorita, disculpe pero tendrán que dar la vuelta por otro lado porque un chico con moto a chocado con otro vehículo. –Luis asintió e iba a cerrar la ventanilla-
Victoria: Espera!- Le cogí la mano a Luis- Al ha venido en moto. Señor,¿ cuantos años debe tener el chico de la moto?
Policia1: Unos….16… -Me me paró el corazón. Abrí la puerta corriendo. El policía cayó del golpe.
Victoria: AL!!! –El estrambótico sonido de las sirenas de la ambulancia y policía solo se silenciaba por el sonido de mi respiración. Salté el cordón policial. Unos cuantos hombres me cogieron. –SOLTADME!- Vi la moto de al destrozada- AL!!! SOLTADME LE CONOZCO!- Me soltarón y lo estaban metiendo en la ambulancia. Mi pecho subía y bajaba aceleradamente.
**:¿Le conoce? –Le di todos sus datos a ese medico-
Victoria: ¿Puedo ir con el al hospital?
**Claro.
Me subi a la ambulancia y llamé a Luis y después a mi madre le envié un mensaje. Al estaba inconsciente. Le pusieron 15 puntos en la cabeza. Tenía una pierna rota, un par de costillas fracturadas y los brazos llenos de rascadas. No pude evitar llorar. El médico al verme tan alterada me dio un calmante. Mientras le curaban las heridas a Al, le estaba cogiendo la mano y hablándole. En un momento pareció que me miró y sonrió. Cuando llegamos al hospital Luis ya había llegado con el coche. Se llevaron a Al y estuve mas de dos horas sin saber que habían hecho de el, nadie me quería decir nada. Cuando pude calmarme un poco llame a los padres de Al, no tardaron nada en llegar. Les conté todo los que sabia y nos sentamos a esperar. Luis me abrazaba y no paraba de repetirme que todo iba a estar bien. Pasamos ahí toda la noche. Se llevaron a Al a una habitación solo., ya que había entrado en un come muy muy ligero, del que tardaría unos dos días en despertarse. Pasé todo el sábado y todo el domingo con el en la habitación . Sus padres insistían en que me fuera , pero no quería, necesitaba estar ahí cuando despertara. Luis me trajo unas cuantas cosas que necesitaba y algo de ropa. Luis también intentó convencerme un par de veces. Salí a fumarme un cigarro, Luis me acompañó.
Luis: ¿Porque te preocupas tanto por el?
Victoria: Aunque me haya hecho daño es muy importante para mi.
Luis: El no se preocupo por ti cuando estabas en el hospital!
Victoria: Luis…tranquilízate… - Apagué el cigarro, cogí su cara con mis manos y le bese-
Luis: Eres demasiado buena. –Me separé-
Victoria: Pero a las malas soy muy mala.
Luis: Ven anda –Abrió los brazos para que me acercara a el y le abrazara. Asi lo hice-
Victoria: Te quiero.
Luis: Yo mas princesa.-Estuvimos un rato abrazados en silencio.- Mañana irás a clase?
Victoria: Todavía no lo se…
Luis: Deberías ir…así a lo mejor te despejas. –Sonó mi teléfono. Era la Madre de Al. Subí corriendo a la habitación.
Madre Al: Se esta despertando. –Me coloque a los pies de la cama a esperar ya que sus padres estaban a los laterales. A los pocos minutos los medico me sacaron fuera de la sala. Me dejaron entrar.
Al: Victoria! –Fue a moverse y obviamente se hizo daño. Fui corriendo hacia el-
Victoria: Tranquilo…-Le di la mano. Estuvimos hablando un rato, pero se notaba que no se acordaba de muchas cosas.
Al: Que tatuaje mas bonito! –Me miró la muñeca-
Victoria: Si ya lo habías visto…
Al: Pues no me acuerdo…
Estuvimos hablando hasta que se volvió a dormir. El médico me contó que debido al golpe en la cabeza no recuerda muchas cosas, pero con un poco de trabajo lo acabaría recordando, ya que el golpe no había sido lo suficientemente fuerte como para perder toda la memoria y no recuperarla. Iba a clase cada día, y después de comer iba al hospital, llevaba allí los deberes, así al podría ir haciendo también si se encontraba capaz. Algunas tardes los del grupo se venían a verle, aunque Berta y su mini grupo siempre encontraban un examen o algunos deberes por hacer. Al se acordaba de todos y de algunas cosas que habían hecho, y algunas se las recordaban. Al cabo de dos semanas al ya tenia el alta y podía ir a clase, con muletas eso si, su pierna tardaría otras dos semanas en estar bien todavía. Todos se alegraron de su llegada. Cuando todo el mundo estaba con el y las chicas lo admiraban por todo lo que ha pasado y por sus cicatrices, parecía que yo no existía. Era demasiado popular para juntarse con ‘La nueva Viki’ como me llamaba todo el mundo. Simplemente…quería desaparecer…
