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CAPÍTULO 30<3 well ya sé que los que leyeron el OS se esperan algo distinto a lo que van a leer pero nO EXISTE LA PERFECCIÓN EN ESTE FIC ahre igual disfruten :D


Ha estado pensando.

No es como si pudiera pensar todo el tiempo, ya que obviamente quedarse pegado en algo mientras estás en público llama la atención; pero en esos momentos donde no hay nadie, quizá está en su casa, quizá en el bus para ir a la escuela o para devolverse a su hogar, se queda mirando la nada pensando en aquello que de verdad importa.

Niall casi siempre actúa cuando tiene miedo. Ha vivido toda su corta vida aterrorizado de demostrar a los demás que cree que recibirá un castigo. Y a pesar de que ese es su principal problema, no es lo primero en que se pone a pensar.

Cómo no; empieza por Harry.

Pasar por una ruptura no es fácil, mucho menos cuando él de verdad quería al chico con el que estaba. Y de hecho, se vuelve mucho más difícil cuando está en la escuela porque lo que hace Niall es prestar atención en clases, y en el descanso, piensa en Harry y en su ausencia en los pasillos. Pasa lo mismo en el almuerzo, en la salida, en su habitación; en cada maldito lugar recuerda a Harry, y si bien puede ser que es porque todavía tiene cosas de él, como esa bufanda que no piensa devolver; ese llavero que recibió uno de esos días en que el rizado quiso salir con él; o esa foto en el fondo de su mesa de noche, también está la escuela, y en la escuela está Louis.

Y no es solo él. Pero Louis fue (y sigue siendo, según todos) el mejor amigo de Harry, quien lo acompañó en todos esos años, le sacó risas, le animó y le conoció a fondo, recibiendo con honor el nombre de mejor amigo. Cada cosa que le pasaba al rizado, Louis lo sabía al minuto. Eran esa clase de mejores amigos que tenían esa conexión cuando algo le pasaba al otro, y que se comprendían la mayoría de las veces. Es por eso que quizá Niall se sorprendió cuando Louis explotó en frente de todos y dijo que no tenía ni la menor idea de que Harry se iría antes a Oxford.

Niall no es tonto, y sabe que, de alguna forma, por más que sean amigos, el castaño está resentido con él. Lo trata bien, pero lo evita. Y las miradas que le da por los pasillos tampoco pasan tan desapercibidas, mucho menos para el rubio, quien últimamente se siente culpable de todo.

Y claro, se seguirá sintiendo culpable si toda la escuela piensa que él ha provocado aquello.

Niall piensa en ello unos días. Al principio dice que sí, él lo ha hecho. Pero luego se da cuenta que la decisión fue de Harry; nadie le ordenó que se fuera antes, y si el rizado no quería afrontar lo que tenía por vida entonces es su problema haberse ido, no de él. Lo único que hizo Niall fue intentar buscarlo sin encontrarlo.

Se sintió menos culpable, y siguió de largo con ello, aún sintiendo ese vacío que Harry había dejado al terminar con él e irse tan repentinamente.

Luego comenzó a pensar en él mismo. En su futuro. En lo que haría. Faltaban apenas dos semanas para que estuviera graduado y comenzaran las vacaciones, y aunque él ya sabía qué iba a hacer, lo dudó.

La misma tarde en la que Harry se había ido, Niall abrió la carta de la universidad en donde había postulado para la beca. Y joder, si no sonrió es porque todavía estaba demasiado triste por la partida de Harry como para asimilar que había quedado en Warwick.

Tiene la beca, y eso es fantástico. Pero, ¿hasta qué punto?

¿Realmente está él bien como para entrar a la universidad?

Es allí cuando empieza a pensar en su problema, y lo peor de ello, es que ha tenido que perder a alguien para darse cuenta.

Sigue evitando a toda su familia, pero aquello se vuelve casi imposible ya que cuando Harry era su novio, siempre escapaba a la casa del rizado para hacer cualquier cosa y distraerse un rato de su situación. A veces se queda fuera de casa hasta las siete. Otras, saca a pasear a los perros. Y cuando no tiene alternativa, entra a la casa e ignora a su madre llamándolo para que vaya a cenar.

Aprender a amar [NARRY, AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora