Aprender a amar [NARRY, AU]

(08)

Perdón por la demora, tuve unas semanas llenas de cosas y no me podía preocupar de subir, pero ahora tengo vacaciones de invierno :D

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Niall no lo está pasando bien.

Ya hace unas semanas, había tenido una conversación con sus padres que le dejó un mal sabor en la boca. Y cómo no, si ellos decían -tanto a su hermano como a él- que visitarán Irlanda durante las vacaciones de invierno, y visitar Irlanda es algo que él no quiere hacer, mucho menos cuando ya ha olvidado la mitad de lo sucedido allá cuando era niño.

Es allí cuando conoce a Zayn.

Zayn es un chico un año menor que él, el cual se hizo "famoso" hace unos meses cuando hubo una presentación de música en la escuela y él se destacó cantando, agregando el factor que tiene una novia un año mayor, y aunque tienen apenas un año de diferencia, logró llamar la atención de otros porque el moreno no se ve muy maduro.

Niall lo conoció cuando se metió el club de fútbol. Al principio, no se hablaban mucho, como es de esperarse. Pero luego, Zayn comenzó a acercarse a él, para pedir cosas tan simples como apuntes del año pasado, ya que a él le servían a la hora de estudiar, y como Niall no tenía ningún problema, se los prestaba. Después empezaron a hablar un poco más, hasta tener la confianza suficiente de contarse cosas que debían contarle a alguien que no fueran sus propios amigos.

Niall no ha tenido amigos antes, solo un niño que conoció cuando tenía once años en un club de natación al que fue por alrededor de seis meses y luego se retiró, pero aparte de él, nadie más. Es por eso que ya ni recuerda qué es lo que se siente tener un amigo, pero si debe ponerle una etiqueta a Zayn, le puede llamar conocido.

Desde ese preciso momento en que le contó lo que le pasaba, desde su pasado en Irlanda, la situación de sus padres, su situación, lo que siente y lo que no, ya que necesitaba contárselo a alguien que no fuera sus padres... Ha comenzado a creer que Zayn es su amigo.

Es decir, sí, a veces se hablan. Pero el menor tiene sus amigos en su clase, y Niall... Bueno, él no tiene a nadie, pero se entiende que no es lo mismo.

Y cuando ya han pasado las vacaciones de invierno, Niall de verdad siente que no la está pasando bien.

Esas semanas en Irlanda le sirvieron para obtener recuerdos que pensaba haber olvidado. Recuerdos como caminar por las calles de Mullingar solo, y a veces con Greg; recuerdos como la casa de su tía y su hospedaje allí, recuerdos como los regaños que recibía por parte de sus tíos cuando él quería abrazar a alguien, o siquiera sonreír por algo pequeño.

Niall sabe qué es lo que le atormenta. Su hermano, también. Pero ninguno de los dos lo quiere decir porque probablemente, los demás lo tomarán como algo tan pequeño... Y no es pequeño, no cuando un niño de tres años que debe desarrollar su personalidad se encuentra bajo el cuidado de personas que no permiten el amor. No cuando un niño de once años, como es en el caso de Greg, que recién se adentra a la pubertad, es reprimido para siquiera sentir algo tan mínimo como querer sonreír porque su hermano pequeño ha dicho una palabra mal.

Quizás por eso evita a Harry a toda costa; porque se siente mal. Ha pensado en sus sentimientos por el rizado durante ese tiempo, y todavía no tiene una pista de lo que pasa. Y no quiere que el otro resulte dañado, porque sabe que hace un tiempo atrás le dio un poco de esperanzas y que ahora se aleje por completo de él...

No es lindo.

Por eso se encuentra en la azotea de su escuela, almorzando, mientras observa la cancha de fútbol y a algunos estudiantes comer sobre el pasto de esta. A lo lejos, puede ver una figura que rápidamente identifica como Harry, quien ríe y también se sonroja por cosas que su grupo de amigos dicen. Poco después, llegan las chicas, y es allí cuando se da cuenta, que Harry es de esas personas que atraen mucho la atención, lo que lo convierte en un popular.