Nada es Imposible (Fanfic Chris Evans y tu)

De vuelta a casa.

-(T\N)...(T\N)!!- siento que mueven mi hombro.

-Ya estoy despierta- digo y lentamente me siento en la cama- buen día-

-Hola linda cómo te sientes?- pregunta el rubio.

-Bien, has visto a Chris?-

-Si, hace una hora despertó y quiere verte-

-Está bien, vamos!!- lo más rápido que me permite mi golpeada anatomía bajo de la cama y guiada por Scott llego a la habitación de Chris. Abro y asomo mi cabeza, lo veo recostado en la cama, con los ojos cerrados, su dedo meñique vendado y algunos moretones en su bello rostro.

-Scott te dije que no quiero ver a nadie- dice aun con los ojos cerrados.

-Ni siquiera a la madre de tus hijos?- rápidamente abre los ojos, el menor de los Evans sonríe y deja la habitación- te extrañe bonito-

-Amor!!- se acerca a mí, y abre sus brazos, rápidamente me refugio en ellos y escondo mi cabeza en su cuello-te amo, te amo, te amo, te amo- susurra incontables veces a mi oído.

-Lo siento mucho- digo sollozando- lo siento mucho todo esto es mi culpa-

-No lo es- dice acariciando mi mejilla.

-Si lo es, mi trabajo puso en riesgo tu vida y la de nuestros hijos, no me lo voy a perdonar nunca-

-Amor...nada de esto es tu culpa ya hable con Emily y García, ellas me contaron lo que paso es día en tu casa, sobre tu esposo y los mellizos-

-Si-siento no haberte contado eso, no se dio la ocasión y...-

-Te comprendo y déjame decirte una cosa más, esta vez será diferente no dejaré que nadie lastime a mi familia, es una promesa-

-Bonito no hagas promesas que tal vez no puedas cumplir, hace años que estoy batallando contra ellos, estoy cansada que lastimen a las personas que quiero-

-(T\N) mírame- levanto la mirada para encontrarme con esos hermosos ojos azules- no lastimaran a nuestra familia- asiento levemente y dejo un pequeño beso en sus labios.

-Quieres quedarte aquí conmigo?-

-Claro que si- nos acomodamos en la incómoda cama del hospital. Apoyo mi cabeza en su pecho y él me abraza por la cintura.

-Me gusta cuando estamos así- dice acariciando mi piel bajo la bata- y a ti??-

-Sí, me encanta- susurro. Nos quedamos así unos momentos más, él acariciándome el vientre, yo acariciando su pecho y oliendo su colonia cítrica que tanto me vuelve loca.

Estoy cerrando mis ojos cuando su mano baja de mi vientre hasta mi cintura, recorre el elástico de mi ropa interior. Me retuerzo levemente ante la sensación que deja sobre mi piel, levanto mi cabeza y me encuentro con sus penetrantes ojos azules. Baja su mano un poco más comienza a acaricia mis muslos, estas caricia tan tiernas pero a la vez muy sugestivas son lo que me encanta de estar así con él.

-Christopher...- trato de sonar seria pero sueno desesperada.

-Si amor??- dice con una sonrisa socarrona. Vuelve su mano al elástico de mi braga pero esta vez engancha su dedo pulgar y comienza a jugar con ella. Suspiro profundamente tratando de calmar mi agitada respiración y trato de concentrarme en otra cosa. Sube y baja su mano repetidas veces y cada vez que baja lleva mi braga un poco más al límite, repentinamente las baja demás y comienza a acariciar el muslo izquierdo cerca de mi intimidad.

-Cariño...-susurro casi jadeando, observo sus hermosos ojos color zafiro, sus pupilas están dilatadas culpa de la excitación que recorre nuestros cuerpos, me acomodo un poco mejor para poder besarlo, nuestros labios se rozan y nuestros alientos chocan, estamos cada vez más cerca...hasta que escuchamos el médico entrar a la habitación.