Adiós.

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Después de todo lo que paso creo que no me queda nada en NY, y al fin me decidí hacer lo que hace años dije que haría y nunca me atreví, seguiré adelante, esta cuidad tiene muchos recuerdos que me gustaría olvidar y un nuevo comienzo me ayudara en eso.

Termino de preparar mis maletas y salgo de la casa, en la puerta del edificio me espera Natalia y Mateo para despedirse, separarme de este par me a resultar difícil ya que los considero mi familia, sé que realmente me harán falta, sobre todo Mateo que es como la pequeña luz de mis ojos, el hijo que no llegue a disfrutar.

Luego de un rato de llantos y promesas de volver a vernos, subo las maletas a mi auto y salgo de allí. Lloro todo el camino al restauran no quiero despedirme de Felipe, es mi hermano, mi amigo, mi confidente, pero debo hacerlo, sé que él quiere lo mejor para mí y a pesar de que nos costara horrores estar separados podremos volver a vernos algún día. Llego al local salgo del auto y entro secando mis lágrimas, lo llamo este se acerca y yo solo lo abrazo.

-¿Que sucede?-pregunta preocupado.

-Adiós...me voy-sollozo entre sus brazos-

-¿Cómo así, a dónde vas?-nos separamos, mientras seco mis lágrimas.

-Sí, me voy, me mudo de NY...no quiero estar más aquí y voy a seguir tu consejo, seguiré adelante con mi vida y para eso me mudare a Roma- este solo me abraza y comienza a llorar en mi hombro. Sabía que no tendría que haber venido a despedirme pero no hay nada que hacer ya estoy aquí y solo puedo llorar junto a él.

-Te voy a extrañar mucho- dice entre sollozos- mi hermanita hermosa, te extrañare cada día desde que te vayas hasta cuando regreses, sé que es lo mejor para ti, pero te extrañare-

-Sabía que lo entenderías, gracias por todo, Te Amo- beso su mejilla y salgo de ahí lo más rápido posible, no quiero quedarme un minuto más en ese lugar ya que si lo hago no saldré de aquí y Felipe tampoco lo permitiría.

En camino al aeropuerto observo el paisaje de la cuidad, recuerdo todos los momentos lindos y feos que viví el ella, me siento liberada, todo lo que paso me ha enseñado a no esperar a nadie tengo que seguir adelante sin importar que o quien...

En camino al aeropuerto observo el paisaje de la cuidad, recuerdo todos los momentos lindos y feos que viví el ella, me siento liberada, todo lo que paso me ha enseñado a no esperar a nadie tengo que seguir adelante sin importar que o quien

Una vez en el aeropuerto bajo mis maletas y me dirijo a la aduana, checo mi auto para que lo transporten a Roma y me dirijo a la puerta de embarque para abordar el avión. Unos pasajeros antes de que sea mi turno suenan mi celular y lo atiendo.

-¿Hola?-

-Hola (T\N), no te vayas por favor, necesitamos hablar...- escucho la voz del otro lado que no es la de Scott.

-Lo siento no sé quién me está hablando...-escucho una respiración agitada del otro lado de la línea- hola, hola ¿me escucha?-

-Si, si te escucho, yo...no soy Scott...soy Chris- se me heló la sangre ¿me está pidiendo que vuelva que hablemos?

-¿Que te crees? ¡Me echaste de tu casa como si fuera una ladrona! me trataste como una prostituta, y tienes una mujer ¡por dios santo! ¿Crees que puedes venir así como así a pedirme que vuelva? Hombre tenías que ser para comportarte como un idiota, Evans ahora soy YO la que te dice que continúes con tu vida, realmente tienes razón en todo lo que dijiste tenemos que seguir adelante y eso es lo que haré... Todo lo que paso fue un error pero no me arrepiento de nada.-estoy gritando y llorando en medio del aeropuerto, pero ya no me importa nada- Que tengas una buena vida con tu pareja, lo dije una vez y lo digo ahora, si realmente se aman sean felices. Por cierto hice lo que me pediste, deje a tu familia en paz ahora tu déjame a mí en paz y no vuelvas a molestarme.- Corte la llamada y rompí el celular en dos. Cuando llegue a Roma comprare otro.

Subo al avión, y por alguna extraña razón me siento aliviada, creo que a pesar de todo amare a Chris por siempre, pero necesitaba decirle todas las cosas que me guarden estos últimos dos años y medio. Me recargo en mi asiento y trato de descansar, en más o menos 8 horas estaré en Roma y comenzare con mi nueva vida, espero que esta vez sea mucho mejor.

Luego de 8 horas y medio el avión aterriza en la capital Italiana junto a tiempo para el almuerzo, bajo del avión y paso por la aduana para registrarme, tomo mis maletas y salgo al estacionamiento del aeropuerto a buscar mi auto. Luego de 15 minutos lo encuentro y logro sacarlo. Conduzco a mi nuevo hogar luego de unos 20 minutos de viaje este se encuentra en un área residencial de Roma, tranquila y sin mucho problema. La casa la compre hace años como un lugar de escape por si tenía que huir del país.

Llego a mi nuevo hogar y abro la puerta lo primero que hago es dejar mis maletas y llamar a al equipo, estos se impresionan bastante de mi partida pero están más que contento por mí, les comento que seguiré trabajando para ellos, y que por supuesto están más que invitados a venir a visitarme. Hablamos por manos o menos media hora hasta que llega el camión de la mudanza, los despido y comienzo a bajar las cajas, me lleva todo el día ordenar la casa he estado tan ocupada que me he olvidado de almorzar por lo que el hambre me está matando.

Salgo de casa y recuerdo que no sé dónde ir, suspiro pesadamente, esto de acostumbrarme a lo desconocido no me gusta, saco mi celular y busco un restaurant cerca. Encuentro uno a pocas cuadras de casa y me dirijo a él, me distraigo con los edificios mientras camino por las pintorescas calles, que a pesar de ser construcciones antiguas tienen ese toque moderno que los hace hermoso. Tan fascinada voy mirando él nuevo paisaje no me doy cuenta que un hombre viene hacia mí y chocamos.

-Lo siento- dice él desconocido- venía muy concentrado en mi celular-

-Está bien-le sonrió-creo que yo también vengo distraída-le digo-

-Soy lucha, Luca Dávila mucho gusto-estira su mano para saludar-

-Soy (T\N) (T\A), un gusto-lo saludo después de un silencio incomodo le pregunto- ¿crees que puedes recomendarme un buen lugar para comer?...soy nueva aquí y no sé dónde estoy realmente- reímos los dos y me dice-

-Creo que me di cuenta, al ver esos bellos ojos que estas pérdida- me sonrojo un poco y agacho mi cabeza-

-Si, gracias por ser mi guía-le sonrió.

-De nada, además si me regalas esa sonrisa hermosa todos los días, me quedare contigo por siempre-

-¡Basta! Por favor-le digo riendo y tapando mi cara-

-¿Basta con que?- pregunta haciéndose él inocente-

-Basta ya no me digas cumplidos que me sonrojo y no me gusta, además... No juegues él inocente conmigo, no funcionara- le digo con mis ojos entrecerrados y reímos.

-Está bien, lo intentare-levanta las manos rendido- ahora ¿vamos por tu cena?-

-Me parece bien, vamos- caminamos hasta un restaurant y lo primero que pedí fue pizza, un poco cliché pero es Italia como no hacerlo.

La noche paso entre chistes, muchas carcajadas de parte de los dos, muchos sonrojos de parte mía, y algunos de parte de él también. Una vez terminada la cena caminamos hasta mi casa y en la puerta me despido.

-Adiós Luca, fue un placer conocerte-le digo- espero verte pronto.

-Lo harás vecina, esa de allá- señala la casa de dos pisos que se encuentra cruzando la calle- es mi humilde morada, así que cuando necesites algo solo avísame ¿si?-asiento con mi cabeza.

Nos despedimos con un beso en la mejilla que duro más de lo normal, no fue para nada incómodo, realmente me gusto. Una vez que nos separamos lo saludo con la mano y entro a mi hogar extrañamente feliz... Creo que estoy cumpliendo con mi promesa de seguir adelante.



Dios esto se pone cada vez mas intenso y Evans sigue comportándose como un idiota...Espero que les haya gustado es capitulo, voten y comenten, cualquier duda o sugerencia que tengan pueden comentarlas. Les amo 😚😚


Nada es Imposible (Fanfic Chris Evans y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora