Capítulo XC

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Ya había anochecido cuando Tarrant entró en la habitación. Alicia se encontraba sentada sobre la cama, aguardando a que llegara.

-¿Me estabas esperando?- le preguntó él, inclinándose para darle un tierno beso.

-Si, cariño. Quería hablar contigo- respondió ella.

-Dime- asintió el Sombrerero, sentándose a su lado.

-La verdad, no quisiera que mañana sea un día triste para nosotros. No me sentiré tranquila pensando en que tu estarás sufriendo aquí, durante mi ausencia. Prométeme que te mantendrás ocupado y que no pensarás en cosas malas. Yo estaré de vuelta antes del anochecer. 

-Está bien, te lo prometo. Serán horas que parecerán años, pero estoy dispuesto a apoyarte en esto, si es tan importante para ti.

-Lo es. De lo contrario, siempre me quedará la incertidumbre.

A pesar del inmenso dolor que le provocaba la sola idea de imaginar a Alicia lejos de él, Tarrant se mantuvo fuerte. Confiaba en ella y estaba seguro de que cumpliría con su palabra.

-Piensa que esta será la última vez. Luego de eso, por fin podremos estar juntos para siempre- añadió la joven, acercándose más a él.

-De acuerdo, pequeña. No te preocupes, no voy a sufrir- mintió Tarrant, sonriéndole lo más sinceramente que le fue posible.

-Gracias, querido. Eres mi vida entera- le susurró Alicia, abrazándolo muy fuerte.

-Tu eres más que eso, para mi. Eres todo mi Universo- respondió el Sombrerero, recostándola poco a poco. -Te amo más que a nada.

-Y yo a ti- respondió ella, besándolo con toda la pasión que brotaba de su interior.
Ambos se amaron aquella noche como si hubiese sido la última, a pesar de que no era un "adiós" el que se estaban dando, sino un "hasta pronto". 

Sin embargo, el día que se avecinaba, cambiaría sus vidas para siempre. 



Alicia: El Retorno al País de las MaravillasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora