¿Les han dicho "haces una montaña de un grano de arena"?
Así se sentían Julia y Roma, pues después de conversar un rato se dieron cuenta de las decisiones tontas y drásticas que habían tomado cuando tenían 17 años.
Se sintieron estúpidas, rieron, lloraron y volvieron a reír.
¿En qué momento había comenzado todo el drama?
No lo sabían.
Pero querían terminarlo.