t r e i n t a y t r e s

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Maratón 3/3


-¡Felicidades viejo!-Gastón,el cual le acababa de gritar en la oreja apoyó su brazo y redeo el cuello del chico,este se quejó fastidiado.
-¿Cómo se siente al cumplir 19?

-Mejor dime tu...¿Cómo se siente ser tan irritante?-le soltó Matteo deshaciendose de su agarre,le observó molesto mientras intentaba arreglar un poco su cabello.

Gastón toco su pecho ofendido,ni caso le hice y seguí mi camino un poco molesto.-¡Epa...!¿Y a ti que te ha pasado?-mencionó mientras seguía los pasos de su amigo.-No me digas más...¿Problema de astronomía?-Matteo paro en seco por el comentario de su amigo.

-¿No puedes dejar de decir bolucedes ni en mi cumpleaños?-le reclamo él enfadado,Gastón elevó sus brazos pidiendo calma.

-¿Pasó algo?-le pregunto ahora un poco preocupado,Matteo le dedico una rápida mirada mientras suspiraba y se sentaba en un Banco pesadamente,Gastón le siguió.

Matteo rasco su cabeza un poco confundido.-Es que...Tengo la sensación de que algo me oculta.

-¿Porque piensas eso?

-El otro dia la llamaron...Y No me quiso decir quien es.-Matteo apoyó su rostro en sus manos apollados sobre sus rodillas, observó a su amigo al notar una de sus manos en su espalda.

-No te angusties,si no te lo dijo es porque tal vez no fue importante.

-Sea como sea,ahora mismo voy a averiguarlo.-Gaston fruncio su rostro totalmente confundido,sin decir nada más Matteo se levantó y empezó a correr detras de su objetivo.-¡Simón!

El castaño dio media vuelta muy sorprendido.-¿Matteo?-susurro para el totalmente confundido,al acabar de dar la vuelta completa se topó con su rostro inconfundible.-¿Necesitas algo?-le pregunto lo más amable posible, puesto a pesar que le había prometido a Luna y su madre llevarse bien con el...Era muy difícil cambiar el odio por amabilidad.

Matteo rasco su nuca confundido por el tono tan sereno de Simón,no le dio importancia y decidió ser directo.-¿Llamaste el otro dia a Luna?-le pregunto Matteo seriamente.

-No.-negó lentamente,otras veces Matteo no le hubiera creído pero esta vez era distinto,sabía perfectamente que si lo huviera hecho,el primero en restregarselo sería precisamente a él.-¿Todo bien con Luna?-pregunto preocupado,Matteo arrugo su expresion.

¿Que narices le importaba como estána su novia?

-No te importa.-le respondió Matteo lo más cortante posible, Simón suspiro intentando tranquilizarse.-Eso era todo.

Matteo dio media vuelta dispuesto a irse,pero Simón le detuvo suavamenr el brazo,él lo miro y se soltó bruscamente.

-¿Qué coño quieres?-le replicó Matteo totalmente furioso,si era algo que no soportaba era que le retuvieran  cuando tenía la intención de irse.

-Tranquilo...No quiero pelear.-le anunció Simón apaciblemente,le observó fijamente,tal vez esto sería lo más complicado que haría en toda su vida.

¿Pedirle a Matteo paz?

¡Por dios si llevaban años con una guerra infernal!

-Escucha...He hablado con mi madre y he llegado a una conclusión.-Matteo elevó sus cejas sorprendido,tal vez porque era la primera vez que hablaba cordialmente y pasaban más de treinta segundos sin insultos ni agresiones,todo una novedad para ambos.-Ambos,tenemos que hacer un esfuerzo y intentar llevarnos bien.-Matteo abrio su boca literalmente,jamas se habria podido imaginarlo.

Peligrosa AtracciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora