Mi piel se sentía en carne viva como si la hubiese restregado muy fuerte con la esponja mientras agua caliente caía sobre mi cuerpo. Olvidé tomar mis pastillas para dormir así que ni lo intenté. No estoy segura si fue por el hecho de que me iba a quedar en un lugar diferente o ver a mis vecinos follando de manera alucinante. De cualquier manera, había dado vueltas toda la noche.
Después de secarlo, coloqué mi cabello en una aún húmeda cola de caballo y me puse una camiseta negra y unos vaqueros. No era mi mejor atuendo pero igual no lo estaba intentando con fuerza.
--Feliz primer día de escuela --gritó mi pequeña prima cuando entré en la cocina. Estaba sentada en la mesa con un pequeño tazón de avena frente a ella y otro gigantezco lazo en su cabello.
--Coloreé esto para ti --sonrió, sosteniendo una hoja de papel. La tomé y miré hacia abajo para ver dos figuras hechas de palitos sosteniéndose de la mano frente a una casa rosada--. Esta soy yo --señaló la figura más pequeña con cabello castaño--, y esta eres tú. --Mi figura hecha de palos era cerca de siete centímetros más alta que la de ella.
--Gracias --dije con una pequeña sonrisa--. Es muy bonito. --Tomé un vaso y lo llené de jugo de naranja antes de sentarme junto a ella.
--¿Quieres algo de comer? --Miré al otro lado de la habitación, encontrando a mi tía sentada en la isleta con una taza de café en sus manos.
--No gracias --contesté, tomando un sorbo de jugo--. No soy una persona de desayunos.
--El desayuno es la comida más importante del día --declaró Sophia--. ¿Verdad mami?
--Eso es cierto, cariño --contestó mi tía, girándose para sonreír hacia su hija--. Tu tío Nam va a dejarte en la escuela en su camino para llevar a Sophia al jardín de infancia --dijo ella, girando su atención hacia mí--. Ojalá tengamos algo de tiempo este fin de semana para buscarte un coche para que uses mientras estés por aquí.
--No necesitáis hacer eso --insistí, sintiéndome incómoda. Ya me habían aceptado en su casa; no necesitaban comprarme un coche también--. Puedo tomar el autobús. --Nunca había tomado un autobús antes, excepto en las ocasionales excursiones y juegos cuando era porrista, pero no debía ser muy difícil, ¿verdad?
--Ni hablar --replicó ella, poniendo su atención en el televisor--. Probablemente no nos quieres a Nam y a mí llevándote todos los días a la escuela. Recuerdo lo vergonzoso que era en preparatoria, especialmente cuando era tu padre el que me llevaba. Espantaba lejos de mí a todos los chicos lindos. --Se rió, sacudiendo la cabeza por el recuerdo. Sonreí, porque podía ver a mi papá haciendo eso. Si no hubiese tenido a Ryan, el habría hecho lo mismo conmigo.
--Buenos días, bellas damas --saludó tío Nam en voz alta, caminando un poco en la cocina, llevando un traje negro con un maletín en su mano. Sí, definitivamente tenía todo el aspecto de "soy un jodido abogado, no juegues conmigo".
--¡Hola papi! --chilló Sophia, saltando de su silla--. ¡Ya estamos listas para la escuela!
--Apuesto que lo están --el rió, alcanzando a su adorable engendro, le dió un beso rápido en los labios a mi tía, diciéndole adiós.
--Muy bien, Daisy, ¿lista para irnos? --preguntó, mientras enjuagaba mi vaso y lo ponía en el lavaplatos.
Mi cerebro estaba gritando un enorme INFIERNOS NO pero mi cabeza decidió ir en mi contra.
--Agarro la mochila y voy.
Corrí por las escaleras subiendo de dos en dos los escalones y entré en mi habitación. Fui directa a mi mesita de noche por mi celular, pero no estaba allí. ¿Qué rayos hice con él?
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Viviendo con nuestros defectos (Jimin) BTS
FanfictionPude no haber jalado el gatillo, pero también pude haber hecho que la bala no lo hiriera.