"INEVITABLE" (Miraculous Ladybug fanfic)

Capítulo 26

La risa de Hawk Moth al ver que Chat Noir se había rendido resonó en todo el lugar, pero un silencio aterrador los acompaño luego de que al héroe se le deshiciera la máscara y dejara ver su conocido rostro debajo de ella.

-A...Adrien-a Marinette se le paró el corazón, le empezó a doler la cabeza al tratar de procesar lo que tenía ante sus ojos-todo el tiempo fuiste tú-volvió a susurrar pero al rubio le preocupó la expresión que ella reflejaba, que no era para nada alegre, y entonces ocurrió, la chica se desmayó y Adrien en un segundo corrió de un lado de la habitación al otro para sostenerla.

Hawk Moth, el autor de todas las venganzas y maldades cometidas en Paris, se había quedado sin habla, sentía un terrible nudo en la garganta y la culpabilidad le invadía de pies a cabeza. Adrien. Al final todo había sido por él ¿o no?

-Adrien sostenía a la azabache cuidadosamente-Demoilustrador seguía de pie, contemplando la escena. Su "jefe" se había quedado callado por lo tanto él también lo hacía, aunque ganas de auxiliar a Marinette no le faltaron.

-¿Qué te ocurre Hawk Moth, ahora de la nada resulta que tienes corazón y ya no nos quieres hacer más daño? ¿por qué no vienes a por tu miraculous?-le espetó Adrien intrigado y molesto

-Vete-dijo el hombre como respuesta, la angustia acompañaba a su voz

-¿Que me vaya?¿Acaso me crees tonto?-preguntó confundido el rubio, estaba seguro que era algún tipo de trampa

-Vete, fuera, te estoy dando la oportunidad de irte niño, no me hagas enojar-su voz comenzó a quebrarse, no podía soportar el sentimiento de culpa dentro de su ser. Había estado luchando con su propio hijo por mucho tiempo y lo había herido tanto física como mentalmente.

-Pues no soy cobarde, no huiré, mucho menos de alguien como tú, no te tengo miedo-le gritó Adrien sin saber realmente lo que sucedía, aunque en el fondo estaba muy asustado

-Eres un niño tonto Adrien, no sabes lo que dices ni lo que haces-dijo Hawk Moth lleno de dolor

-¿Por qué sigues discutiendo?, ven y quitame el anillo, si es que puedes-le incitó Adrien, él solo quería que todo esto acabara de una vez por todas

-No, no pelearé más contigo-repondió asombrando a todos aquellos que se encontraban en el observatorio- sal de su pluma mi malvado akuma- dijo Hawk Moth haciendo que de la pluma que Demoilustrador sostenía, saliera una negra y oscura mariposa y así dejando ver a Nathaniel por debajo-Plagg se escondió de inmediato ya que nadie más debía enterarse de su secreto

-¿Qué ocurrió?¿Donde estoy?-preguntó Nathaniel-¡Marinette!-gritó al ver a su amiga inconciente siendo sostenida por el chico culpable de su akumatización.

-¿Por qué lo hicis..-quiso preguntarle Adrien a su peor enemigo, Hawk Moth, pero no pudo terminar la frase ya que este había desaparecido-¡No huyas cobarde!-gritó con todas sus fuerzas, pero al parecer nada ocurriría.

-¿Qué le hiciste?¿Qué le ocurrió?-siguió preguntando cierto pelirrojo quien era ignorado por Adrien.

-Tenemos que salir de aquí-respondió en su lugar el rubio. Enseguida cargó a Marinette en brazos y le ordenó a Nathaniel buscar una salida-...debe haber alguna puerta en el suelo-el chico obedeció y tanteó el piso hasta escuchar un sonido hueco, sonido que le indicaba que había encontrado lo que quería

-Aquí hay una puerta-él la abrió y encontró unas escaleras muy estrechas que quien sabe a donde llevaban. Adrien se acercó-No podrás pasar con ella en brazos-le advirtió Nathaniel preocupado por su amiga

-Claro que podré-contestó irritado el modelo. Entonces echó a Marinette sobre uno de sus hombros y bajó con sumo cuidado por aquellas escaleras.

-Cuidado se golpee-volvió a advertirle Nathaniel

-No soy tonto, claro que estoy teniendo cuidado-respondió Adrien harto de las miradas acusadoras que le lanzaba el chico pelirrojo. Estuvo unos cuantos metros bajando hasta que logró tocar el suelo. Para su buena suerte, era una salida subterránea, hacia los túneles de las alcantarillas. Adrien avisó de esto y enseguida bajó Nathaniel. Ambos se dieron cuenta que se encontraban algo apartados del centro de Paris, como Chat Noir conocía muy bien las alcantarillas pero aquellas eran distintas.

-Vete Nathaniel, por favor-le ordenó tratando de ser amable

-¿Qué? No. Debo estar con ella-dijo señalando a Marinette

-Yo estoy con ella, prometo que la cuidaré. Debes irte, yo la llevaré a su casa, por favor no te enfades, que otro akuma puede poseerte. Luego te explicaré lo que ocurrió-Nathaniel asintió dudoso y salió del lugar. Una vez que lo perdió de vista, Adrien se aseguró de que nadie estuviera cerca y decidió transformarse en su alterego Chat Noir

-Plagg transformame...

...

-Ladybug-dijo Chat Noir acercandose a la joven heroína, tomó su rostro entre sus manos y cerró los ojos esperando que lo besara.

-No Chat, yo amo a otro chico-le dijo ella en forma de respuesta e intentando alejarse

-Me amas a mí-dijo él muy convencido y despreocupado

-No Chat, yo amo a Adrien-respondió la chica muy confundida

-Pero yo soy Adrien-dijo el rubio y Ladybug se sorprendió retrocediendo lo más que pudo.

-No, no es cierto, no puede ser posible

-Sí, si puede ser-enseguida el rubio se quitó el anillo y dejó ver a Adrien detrás de la máscara-¿Lo ves?

-No, esto es un sueño, es falso, estoy segura.

-No Marinette, soy yo-insistía el rubio acercandose nuevamente, pero ella se exaltó al escucharlo pronunciar su verdadero nombre y se alejó de un salto

-¿Cómo sabes mi nombre?-le preguntó angustiada

-Marinette soy yo-repetía el chico

-Sabes quien soy

-¡Marinette, despierta Marinette!-dijo Adrien tomandola por los hombros y moviendola suavemente

-¿Qué?-preguntó ella confundida por su repentino cambio de actitud. De pronto su voz se escuchó solo como un eco y Marinette se encontró rodeada de oscuridad absoluta

-Despierta por favor--escuchó claramente la voz de Adrien

-¡Adrien!-dijo ella abriendo los ojos

-¡Marinette!-exclamó él con una sonrisa al verla conciente y se acercó a darle un tierno abrazo, la azabache lo recibió con una sonrisa, aunque confundida.

-¿Qué ha ocurrido?-preguntó ella asustada, pero ni siquiera le dio tiempo a Adrien para responder, ya que, de un momento a otro se le introdujeron todos los recuerdos de ese día como una punzada en la cabeza y por un instante no supo como reaccionar. Luego del shock, lo primero que decidió hacer fue alejar a Adrien de su pecho y tocar sus propias orejas, confirmando lo que sospechaba había ocurrido

-¡Mis aretes, no están!

....