Capítulo 38.

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Hope POV.

Salimos del agua con Harry agarrándome todavía por los muslos mientras mi cabeza descansa en el hueco de su cuello y me río por cualquier estupidez que me ha dicho, sigue andando hasta llegar a donde están las toallas estiradas en la arena y me deja en una de ellas y él se queda encima para luego rodar a la toalla de al lado mientras se ríe y mueve su pelo mojado. Alarga la mano y me devuelve la parte de arriba que me ha quitado antes y se ríe.

Me la vuelvo a colocar y me doy la vuelta para tomar el sol boca abajo si al niño pequeño que tengo al lado le da la gana de dejarme hacerlo. Giro la cabeza y lo encuentro buscando piedrecitas que se dedica a colocar en la línea de mi columna vertebral.

-¿Te diviertes?

-Pues no me lo estoy pasando mal...

-Ya te veo, si quieres puedo buscar a un niño para que te deje su cubo y su pala y te pones a hacer castillitos en la arena.

-No creo que después de lo que te acabo de hacer en el agua me pegue hacer castillos de arena, pero bueno...

-Eres un enfermo-Río-

-No decías lo mismo en el agua...

-Eres insufrible, no sé como los chicos te aguantan, de verdad.

-Fijate que maravillo soy, me aguantan y eso que no les hago el amor.

-Se está formando una imagen un tanto extraña en mi cabeza así que mejor cambia de tema-Río-

-¿Qué te apaetece hacer esta noche?

-Me da lo mismo Harry, mi única preocupación ahora mismo es ponerme morena y no preocuparme por nada más...

-Esa es la actitud, pero tendremos que aprovechar en algo más las vacaciones que en estar tirados en la arena o en la cama.

-No te lo niego, tiene sitios con mucho encanto, me he estado informando por internet.

-No esperaba menos de ti, así me gusta. Podemos ir a cenar a algunos de esos sitios.

-Cuando piensas ganas puntos Styles.

-Gano puntos con todo Kate, lo sabes.

-Dile a tu ego que deje de asfixiarme por favor.

Se tumba casi sobre mi de nuevo para besarme, con una de sus manos en mi vientre y la otra sobre mi toalla para no tener todo su peso sobre mi cuerpo, muerde varias veces mi labio inferior y me río, se separa un poco juntando su nariz con la mía mientras sonríe y vuelve a besarme.

-Podría pasarme así las veinticuatro horas del día sin ningún problema.

-Te entiendo. A mi me pasa lo mismo pero me imagino a Miranda Kerr.

-Ni que tú fueras Orlando Bloom...

-¿No? Llevo toda mi vida engañado

-Serás idiota-Río mientras pongo mi mano en su pecho y lo alejo y se deja caer de nuevo sobre su toalla mientras se ríe-

Se pone las gafas de sol y se coloca en sitio el bañador amarillo que lleva puesto que ha causado un mini infarto en mi interior cuando lo he visto al salir del baño, todo sea dicho de paso, porque le queda de maravilla, le sienta genial ese color y además, puede ponerselo que le hace justicia, por no hablar del contraste que hace con su cuerpo que empiza a ponerse moreno Se levanta y vuelve a meter en la habitación, coloco mis antebrazos sobre la toalla y le observo como camina hacia la habitación y toda mi atención se centra en su espalda, esa misma en la que me encanta trazar líneas cuando duerme boca abajo, la misma a la que me gusta subirme cuando nos da por hacer el idiota y la misma que me quedo mirando cada vez que se viste.

Bolsillo lleno de sueños.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora