Capitulo 15

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¡AAAAAAGH! Dios, enserio creo que este es el peor día de mi vida, parece que fue hace un minuto cuando la profesora de ingles me emparejo con Alex para hacer el trabajo… ¿Faltan 2 minutos para que suene el timbre! ¡2 minutos! Quiero morir, encima no he visto a Tom por ningún lado y lo peor es que mi “sexto sentido de mujer” me dice que me intenta evitar… no, seguro que ese “sexto sentido de mujer” en totalmente falso, si, seguro.

¡RIIIIIIIIING!

Bien, vamos allá. Recojo mis cosas y las meto en la mochila de la manera mas lenta que puede haber, pero como siempre, todo tiene un fin, cojo aire y salgo de la clase, camino por el pasillo cundo me encuentro a Eli saliendo del baño de mujeres, rápidamente me acerco a ella con desesperación.

-          ¡Eli!

-          ¿Eh? ¿Qué pasa?

-          Sabes que pasa, no quiero Eli, de verdad que no, mátame, no quiero, presiento algo malo…

-          Sara, tranquila, no veo el problema de que vayas a pasar la tarde con Alex, cualquier chica quisiera estar en tu lugar, incluso Marcia, y deja de pensar en lo de Tom, eso será peor, lo único que puedes hacer es esperar a que el decida… tu no puedes hacer nada y lo sabes, fuiste tu quien quiso dejarle decidir y… Mmmm, bueno, me voy.

-          ¿¡Que!?

-          Adiós, Sara.

-          ¡¡Eli!!

Pero… ¿Qué esta pasando? Creo que me buscare otra amiga que no te deje sola a mitad de un discurso de ánimo, y menos cuando el discurso lo hace ella, si, mañana empezare a buscar a alguien con quien…

-          Bueno… ¿Podemos hablar?

(SHOCK)

Mierda.

Quiero llorar.

Maldito.

Seas.

Tom.

-          Claro.

-          Bien, ven vamos a mi coche.

Le seguí por detrás, ugh, creo que hice mal, desde atrás se podía apreciar mejor su perfecto cuerpo, y ese trasero, era, como dicen en las novelas románticas, un Dios Griego, de cabeza a los pies. Mientras admiraba su cuerpo descaradamente sentí una mirada puesta en mi, y cuando me gire vi a Alex mirándome con el ceño fruncido, pero que… ¡LAS CLASES! ¡EL TRABAJO! AAAAAAAAAAAAAAAAGH.

-          Ehhh… Tom, Dame un par de minutos, ¿si? Hoy tenia que darle clases a Alex y me esta esperando. Voy a decirle que tardo un poco, que en todo caso que vaya tirando el.

Su mirada no fue bonita, pero su rostro me lo compenso todo, que guapo.

-          Vale, estoy en el coche.

-          Si, no tardo.

Me encamine hacia el coche de Alex, quien me esperaba apoyado en su capo con los brazos cruzados, otro Dios Griego, no lo voy a negar, aunque, el Dios Griego de los Dioses Griegos es Tom, de eso no hay ninguna duda.

-          Alex, tengo que hablar con Tom, así que…

-          ¿Me vas a dejar plantado? No me esperaba esto de ti Sara.

-          Oye, no me has dejado acabar.

Le odio, mira que es idiota el chico.

-          ¿Bueno, entonces que pasa?

Sara... Admite que me quieresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora