La Verdadera pelea - Camren

El Refugio

LAUREN POV'S

---¿aún sigues aquí?, creía que ya estabas en tu casa---

---Hola Rob, no podía irme aun, la próxima pelea esta cerca y quería entrenar un poco más-- le conteste a Rob mientras seguía golpeando el saco de box.

---¿Qué paso ahora Lauren?--- se acerco y tomo mi hombro para que volteara a verlo.

Rob, o como muchos lo conocían "EL GRAN BIG ROB" es mi entrenador y la persona que más me conocía, pues el sabía cuando yo estaba más que feliz o cuando tenía algún problema o preocupación, o simplemente cuando la estaba pasando realmente mal como en ese momento, pues el fue quien me abrió la puerta cuando más lo necesitaba, comencé a practicar boxeo profesional a los 17 años, anteriormente practicaba el softball pero por una mala experiencia tuve que dejarlo. No creí que el boxeo se convertiría en mi vida, pero así fue, aún recuerdo el primer día que entre a un gimnasio de boxeo tenía 16 años.

Ese día se comenzaba a desatar una tormenta en Miami, las palmeras se sacudían de un lugar a otro, el agua estaba agitada, las olas rompían bruscamente contra la arena, parecía que la tormenta no acabaría pronto, pero la tormenta ese día no estaba en Miami, si no en mi cabeza, jamás imagine que el clima coincidiría tanto con mi estado emocional.

Henry el capitán del equipo de béisbol y el causante de que haya dejado el Softball, además de que estuve evitando a mi familia durante casi un mes, él me había invitado a salir, no era la primera vez que lo hacia, pero era demasiado irritante, pues según él debíamos estar juntos y ser la pareja perfecta, ya que estábamos destinados a estar juntos por ser ambos los capitanes de prácticamente el mismo deporte, los más "populares de la escuela" además de ojos claros, los de él azul zafiro y los míos verde esmeralda, pero el era un completo imbécil y yo era la mejor de la clase y por supuesto que salir con él es lo que yo no quería, no supe más de su existencia, pues el se mudo y no volvía saber de el por suerte

FLASHBACK

---Vamos Laur, sal conmigo--- Henry se acercaba a mi cada vez más. Y comenzaba a inquietarme.

---Aléjate Silvers, no estoy interesada--- me alejé dos pasos, pero él se encargo de disminuir aun más nuestra distancia.

---Mira Lauren, yo no suelo rogar tanto a nadie, deja de hacerte la difícil y Sal conmigo, después acepta ser mi novia, es bastante sencillo, además se que te mueres por mi--- se acerco aun más ami y tuve que volver a tomar mi distancia, estaba comenzando a alterarme.

---Todo el equipo de Softball, he incluso muchas chicas del colegio quisieran la oportunidad de estar conmigo pero...- se acerco y susurro en mi oído--- yo solo te deseo a ti-

Y esas 6 palabras enviaron un escalofrío a todo mi cuerpo, pero no fue una buena sensación, fue todo lo contrario, de repente comencé a sentirme inquieta, nerviosa, alterada.

---Te he dicho que no Henry, no estoy interesada, no me gustas, ni siquiera me pareces atractivo.--- estaba mintiendo, Henry es muy atractivo por supuesto no iba a admitirlo, si el muy estúpido no dejaba de insistir aun que le dijera que es el adefesio mas espantoso que he visto en mi corta vida, admitiendo que es atractivo se volvería aun mas irritante aun, estaba dispuesta a irme, pero el me sostuvo del brazo.

---Tienes que estar de broma, yo se que tú me deseas como yo te deseo--- me atrajo hacía el y me miro fijamente, yo solo apartada la mirada, realmente el me inquietaba. ---pero solo no quieres admitirlo.--- de repente tenía brillo siniestro en sus ojos y sabía que lo que estaba por venir no me gustaría.

Y así fue, rodeó mi cintura con su brazo y colocó su mano en mi cuello, de manera brusca me beso, yo no correspondí al beso y de todas las cosas horribles que me han pasado, ese estúpido beso le ganó a todo, incluso a la vez que me rompí el brazo en una carrera por lo cual no pude jugar softball en mucho tiempo, con todas mis fuerzas lo empuje y le solté una bofetada.

---no vuelvas a besarme IDIOTA!---limpié mis labios con la manga de chaqueta.

---¿acaso estas loca? ¿cómo te atreves a golpearme?--- me sostuvo de las muñecas

---¡Suéltame me estas lastimando!--- el y yo estábamos forcejeando, Henry para mantener su agarre firme y yo para liberar y de paso darle otra bofetada.

---¿porqué es tan difícil salir conmigo? ¿acaso te gusta alguien más? Dime quien es él imbécil aquel para que le parta la cara--- ahora el tenía una cara de furia. Y por un momento me dio terror incluso respirar.

---CONTÉSTAME LAUREN ¿QUIÉN ES EL IMBÉCIL QUE TE GUSTA?--- de repente el miedo se fue y una ola de enojo se apodero de mi ¿quién se creía el para gritarme?

---SOY GAY IMBÉCIL, PERO CRÉEME AUNQUE NO LO FUERA, NI EN ESTA NI EN OTRA VIDA SALDRÍA CON UN ESTÚPIDO COMO TÚ--- y ahí estaba yo confesando mi mayor secreto a un estúpido que probablemente se aprovecharía de ello.

Henry comenzó a apretar el agarre de mis muñecas y todo indicaba que estaba apunto de golpearme...

---ALÉJATE DE ELLA!!--- Chris mi hermano menor llego justo a tiempo.
Henry de inmediato se alejo, pues mi hermano es mas alto que él y Chris es el capitán de lucha de la escuela

---créeme que me mantendré alejado de esa maldita lesbiana--- Nadie de mi familia sabe sobre mi sexualidad y la mirada de enojo de Chris me puso tan nerviosa que no pude hacer nada más que correr.

El gritaba mi nombre, pero no me siguió, lo último que vi fue a Chris tomando del cuello de la camisa a Henry.

Una tormenta se desato en ese momento o al menos yo sentía que comenzaría la peor de las tormentas, poco después el clima acompaño mi lamento, pero nada podía compararse con todo lo que pasaba en mi cabeza, la cara de Chris me hizo pensar que llegando a casa todo empeoraría corrí hasta que mis pulmones no pudieron más, estaba empapada pero eso no me importaba.

Estaba justo enfrente de una puerta, y esa puerta de abrió de golpe, dejándome ver a un hombre bastante grande, no tenía idea de quien era, pero me ofreció entrar.

Era un gimnasio, al parecer aquel gran hombre era el dueño.

---Ten esto--- se acerco ami con una toalla y una taza con lo que parecía ser chocolate caliente--- y toma esto, esta caliente ten cuidado.

---gracias--- apesar de que no conocía a aquel hombre me transmitía demasiada confianza, de repente un poco mas calmada comencé a ver todo lo que había a mi alrededor.

Había un Ring, muchos sacos de boxeo colgados, pesas, cuerdas, posters de luchadores y 3 cinturones enmarcados.

---¿Te gusta el lugar?--- yo solo asentí ---Este lugar es mi mundo, Soy Rob por cierto--- en el momento en que me digo su nombre supe quien era y al verlo detalladamente todo hizo Clic.

Era el Gran Big Rob, uno de los mejores boxeadores de los tiempo, era algo así como un Rocky, pero mejor, no solía ver el boxeo, pero en el periódico leí sobre su retiro, que más que nada fue por una lesión.

---¿te gustaría intentarlo?--- señalo los sacos de boxeo.

---claro--- respondí mientras me levantaba y veía la ventana del lugar, la tormenta aun seguía y espere que al llegar a casa, no fuera peor. Pues si la tormenta de Miami estaba por terminar, la que estaba en mi cabeza también lo haría y si no lo hacía pronto por lo menos había encontrado el refugio que me mantendría a salvo de la tormenta, mi lugar seguro.

FIN DEL FLASHBACK

Ese día mientras golpeaba el saco de box, pude desahogarme de todo lo que me ahogaba en ese momento. Al principio iba al gimnasio de Rob solo a desahogarme pues era mi lugar seguro, pero con el tiempo dejo de ser esa la razón, un amor por aquel deporte comenzó a surgir, Rob me inscribió en los torneos que se llevaban acabo en Miami, nada muy importante, pero era cuestión de tiempo para que poco a poco fuera subiendo, jamás he perdido una pelea desde que comencé a dedicarme a esto, comencé a entrenar por gusto y no por necesidad, pero admito que aveces aun me desahogo cuando golpeo aquel saco, como en ese preciso momento.

---y bien Lauren ¿me dirás que te paso esta vez?--- necesitaba sacar esto y que mejor persona que Big Rob para contárselo.

---Es mi novia... ---