100 de suerte y la habilidad domador de dragon arc 2

Capítulo 24: Alcanzando a Seryanna

Kon'nichiwa minna-san ~~♫♫ Con esto empezamos el nuevo arco de 100 Luck and the Dragon Tamer skill (100 de Suerte y la habilidad Domador de Dragon). Espero que lo disfruten.

Seis días después de que saliera de Tomeron, me encontré sentado en una mesa en Turos's Inn* en Dertan. Era una ciudad situada al Lejano Oriente en las llanuras de Elmendyar, justo después de cruzar el río Sparyx.

[Posada Turos.]

Hasta ayer, el clima estaba de mi lado, pero luego empezó a llover. Fue un verdadero aguacero, e incluso escuché a algunas personas diciendo que apenas lograron cruzar el río. Viajar a través de este tipo de condiciones era posible, pero se tardaría demasiado tiempo, y lo más importante, sería que me vería obligada a acampar afuera. Por desgracia, en el camino de aquí a la aldea Pertiko ni siquiera había una posada o cueva donde un viajero podía refugiarse de la lluvia. Podría correr sin parar. Tenía las pociones, pero no estaba de humor para forzarme así.

Los últimos días, me sentí extraña, ¿tal vez estaba un poco deprimida? Mi mente iba y venía entre lo que me esperaba en la capital y lo que dejé atrás en Tomeron. Alkelios era parte de la razón, pero yo era un caballero, y esto era algo a lo que no podía renunciar no importa qué. Tenía un deber, un trabajo, una misión... No podía decir si valía la pena el riesgo... las consecuencias de mi traición.

Podría literalmente perder todo... A menudo pensaba que cada vez que estas preguntas surgían en mi mente.

Por supuesto, un caballero en mi posición, alguien que hizo un juramento para proteger a su país y a su señor no debe siquiera pensar en algo tan absurdo como enamorarse de un hombre humano*. Para otros, era una aberración, pero yo no era un dios, yo era un dragón ... Se me permitía cometer errores, pensar, esperar y soñar, ser feliz ... Aunque, pensar en ello y hacer algo al respecto Eran dos cosas muy diferentes, y temía lo último.

[Si no recuerdo mal Brekkar lo había consentido. Por lo tanto no creo que haya mucho problema.]

En esta posada de Dertan me encontré sola y mirando la jarra llena de vino de miel, también conocida como hidromiel.

Normalmente, no era una bebedora, pero después de dejar a Tomeron, el alcohol era la única cosa capaz de mantener mi cabeza libre de preguntas y respuestas deprimentes. Cuando llegué a la capital, tendría que olvidar Alkelios y evitar que yo pensara en cosas inútiles.

Idiota... Pensé y luego solté un suspiro.

Mientras todo el mundo estaba charlando y derramando hidromiel en sus gargantas, la puerta de la entrada se abrió de par en par, y la furia de la tormenta afuera se precipitó adentro. Supuse que era probablemente algún aventurero local o desafortunado, así que ni siquiera me moleste en apartar mis ojos de mi bebida, pero luego lo oí... la única persona que estaba tratando de olvidar... el idiota que me hizo sentir así...

[¿El único que te seguiría al infinito y más allá?]

"¡Están lloviendo gatos y perros por ahí! ¡ACHOOO!" Se quejó Alkelios.

"¿Cómo podría llover nekatars?" Preguntó Kataryna.

Tragué y apreté la jarra en la mano. Se formaban gotas de sudor en mi frente.

No puede ser él... ¿Por qué están aquí? ¿Cómo llegaron aquí tan rápido? ¿Solo... cómo? Me pregunté sin poder creer a mis dos oídos.

No pude mirarlo...

No tuve el coraje de hacerlo...

Alguien tiró de la silla frente a mí y se sentó, pero mis ojos estaban clavados en mi jarra, y todo mi cuerpo estaba tieso como una roca. Mi respiración temblaba, pero a pesar de todo esto, no dijo una sola palabra. Sólo esperó allí.