Capítulo 5.- Conoce a Graciela Orson

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Graciela siempre supo lo que deseaba en la vida, ella sería una importante cantante de country. Sí, sabía que no estaba en el lugar correcto para aspirar un sueño así, pero la vida y un desgraciado ex novio la llevaron a ese lugar. No podía quejarse, de todas formas cantaba en el bar dónde también servía de mesera, y alegraba las fiestas de los niños los fines de semanas, cantando los clásicos de Disney, pero ese no era su sueño. Cada año se hacía más vieja y con ello disminuían las posibilidades de ser una reconocida cantante.

Ahora estaba allí, en esa inmensa cola, afuera del teatro, esperando hacer su audición para el nuevo programa de talento. Era un programa local porque en su quinto intento por entrar a The Voice, le salieron las tablas por la cabeza, pero ella no se rendiría. Si el ídolo de Cindy era Mr. Bean, el de Graciela definitivamente era Blake Shelton, y algún día él la oiría cantar.

—¡¿Team Gacela?! ¿Qué idiotez es esa? Y a todas estas, ¿qué haces aquí Roger?

Graciela quería asesinarlo. Ya todas las mujeres tras y frente a ella estaban comiéndose a Roger con la mirada, y eso le sacaba desquicio. A parte estaba allí con esa camisa negra que tenía su nombre mal escrito y una foto de ella, que no era su mejor foto.

—Vine a apoyar a mi amiga. —Roger no esperó más para pasar el brazo sobre el hombro de Graciela atraerla hacia él y tomar una fugaz fotografía.

—¡Agh! ¡Aléjate! Te he dicho que no hagas eso.

Graciela protestó pero Roger ya no estaba prestándole atención.

"Apoyando a la mejor cantante de country no descubierta #GacelaOrson #apoyandotalentolocal #lossueñossisehacenrealidad #laedadnoimportaalahoradecantar #Bestfriendever".

Escribió en el nuevo post de su instagram.

—¿Qué estás haciendo? —preguntó quitándole el celular—. ¡Ay! Eres un imbécil. Borra esa foto en este mismo instante. ¿Cuándo entenderás que todo no tiene que ser publicidad para ti?

—Te estoy ayudando amargada. Yo tengo millones de seguidores, tú solo unos cuantos. Lo admitas o no, que esté apoyándote hoy es de bastante ayuda.

—Mejor cállate. ¿Qué tienes con eso de Gacela?

—Pregúntale a Cindy ella fue la que...

—¡No! —gritó Graciela.

—¿Qué te pasa?

—Allí viene Cindy, no dejes que llegue hasta acá —susurró.

—¿Por qué?

—No ves a quien tenemos adelante. —Graciela señaló, y Roger confundido fijó la vista.

—¡Ah!

—Sí. Tenemos a tal vez el único feo de la ciudad que se ha escapado de Cindy justo frente a nosotros. No sé tú pero no quiero pasar las próximas cuatro horas viéndola en su plan de conquista.

—¡Agh! Cindy en su plan de conquista es tan ¡Ugh! ¿Acaso los cantantes siguen en su lista de estándares?

—Sí, aún no los ha borrado.

—Qué extraño.

Cindy estaba orgullosa de su fea camisa en apoyo a su mejor amiga, lo que le desagradaba era estar en ese lugar tan lleno de personas lindas. Enfocó su vista en Roger cuya estatura lo distinguía del resto.

—¡Cindy! —Graciela se lanzó a abrazarla haciendo que Cindy quedara de espaldas al hombre delante de ella, y Roger se posicionó tras Cindy para impedir que viera hacia allá. —Gracias por esas camisas que hiciste —dijo entre dientes.

La acosadora de feosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora