🌴 El lago de las sirenas

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Día 12

Estaba ya en el doceavo día de su viaje de estudios, sólo le quedaban dos días para poder terminar de disfrutar de aquella isla paradisíaca y después se tendría que ir. Aquél pensamiento le entristecía bastante, ya que eso significaría separarse de Kai y no tenía la certeza de volver a verle.

En ese mismo momento tenía en frente al moreno, bebiendo de una pajita con sus gruesos labios fruncidos sobre el plástico. Por unos largos segundos se quedó mirando esa parte de la anatomía del más moreno, como hipnotizado, hasta que la voz de éste le despertó de su trance.

-Mañana y pasado libro del trabajo, si quieres puedo llevarte a ver mañana por la mañana un sitio...secreto. -Dijo la última palabra un poco más bajo, como si no quisiera que ninguno de los que se encontraban en el chiringuito se enteraran. Aquello hizo que su curiosidad picara.

-¿Secreto? ¿Qué clase de sitio es? -Preguntó adoptando la misma postura que el moreno.

-Es un pequeño lago escondido en la selva, solo una pequeña parte de los nativos de aquí lo conocemos, dicen que es mágico. Bueno...no sé si eso es cierto, pero hermoso sí que es. No hay mucha gente que tenga la oportunidad de verlo. Si vienes te prometo que te irás enamorado de ese lugar.

Aquello le pareció una idea perfecta al más alto de los dos, así que asintió bastante efusivo a su propuesta. De ahí a poco después se pusieron a maquinar su plan para el día siguiente, diciéndole el moreno todo lo que debía llevar, ya que para poder llegar tenían que pasar antes por unas zonas un tanto complicadas. Le dijo que tenía que ir con buen calzado, con un pantalón largo para no arañarse con las ramas bajas y las raíces de los árboles, y también para protegerse de las posibles picaduras de insectos. Kai puntualizó que debía llevar dos botellas de un litro de agua como mínimo, aunque el camino no era muy largo, iba a hacer calor, y no quería que el coreano se deshidratara a mitad de la excursión.

Por todo lo que le comentó que debía llevar, a Chanyeol le pareció que se iban a ir de acampada por una semana mas que una simple excursión de un día a un lago.

De pronto unos brazos salieron por detrás del cuerpo del isleño y lo rodearon, a lo que el atacado respondió con un sobresalto y un bajo grito grave.

-¿Pero qué?

Al girarse descubrió a una chica de cabellos rojizos que conocía demasiado bien. Respiró tranquilo.

-¡Yah! No vuelvas a hacer eso, maldita cría....

La chica tras él siseó. -Vaya poco amor fraternal que me tienes. -Hizo un mohín y deshizo el agarre, reparando después en la presencia del chico más alto.

-Él es Chanyeol, un amigo, ya te he hablado de él. -Explicó señalándole, a lo que el nombrado respondió con un repentino y tímido "Hola" hacia la chica. -Ella es mi hermana, Krystal. Aunque deberían de haberla llamado pesada...

La aludida puso los ojos en blanco y se sentó en una de las sillas que estaban vacías al lado de su hermano.

-Tú sí que eres un pesado. -Le hizo una burla y después se giró a Chanyeol- ¿De qué hablaban? He escuchado algo de una excursión. ¿Puedo unirme?

-No.

-Yah, Kai. No seas malo.

-He dicho que no. -Dijo rotundamente mirando a su hermana. Fue entonces cuando cambió el idioma y empezó a hablar en nativo, no quería que Chanyeol escuchara aquello. -Le voy a llevar al lago de las sirenas, así que no puedes venir.

-¿Estás loco? -Exclamó en nativo también. De la sorpresa Krystal se levantó de la silla formando un gran alboroto. -No puedes llevarlo allí. Anda y ven aquí. -Le cogió de la manga de la camiseta y le levantó. -No tardaré mucho, en seguida te devuelvo a mi estúpido hermano. -Le dijo con una sonrisa falsa al más alto y se llevó de allí al moreno, dejando a un confuso Chanyeol, el cual no entendía nada de la situación.

triton. | ChanKaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora