Perfectly Disagree [PAUSADO]

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Hace unos días falleció de cáncer una persona muy querida para mí, y por ese motivo no he escrito nada para ustedes, perdón.

Capítulo trece.

Emily

Me prometí no ser tan estúpida para excederme de alcohol y acá estoy, pasando vergüenza,  preguntándole a mi propio niñero que fue lo que hice anoche.

Me quedé totalmente quieta solamente mirándolo, ¿Que le digo? No lo sé.

- Que incómoda es esta situación sinceramente, pero quiero aprovechar a aclarar esto, creeme que suelo decir estupideces al estar ebria, sabemos muy bien que tú tienes a tu novia, y yo bueno, todavía no he encontrado a nadie. Pero solo para que te quedes tranquilo, tú solo eres mi niñero, las estupideces que he dicho anoche fueron porque estaba ebria, solo por eso.

Fui un poco directa, pero se lo dije para que luego las cosas no se pongan incómodas entre los dos.

- Claro que sí, yo sólo estoy acá para cuidarte. ¿O al menos así quisiste explicarte verdad?

Claro que no, estúpido.

- Eh.. S.. Si.

(...)

Vacaciones de invierno, simplemente es genial.

Hoy fue el último día de clases hasta tres semanas. Me pareció extraño que nadie se me haya acercado a molestarme, como suelen hacerlo.

Salí del maldito Instituto con libros en mis manos, ¿Y saben que pasó? Lo que suele pasar solo en una película.

- ¡Disculpame, en serio! Dejame que te ayudo.

Un idiota no veía el camino y chocó contra mí haciendo que yo caiga, y los libros también, ¿Algo más cliché no podía ocurrir, no?

Sólo junté los libros y él también, luego estiró su brazo brindándome su mano para que me levante, levanté mi mirada para ver su rostro, no era cierto, no era cierto, maldita sea no era cierto a quien tenía frente a mis ojos.

- ¿¡Aaron!?

- ¿Emily? Que haces aq.. Espera, ¿Tú también estudias aquí?

- Lamentablemente. - Reímos al mismo tiempo, luego sin pensarlo me lancé hacia él y lo abracé muy fuerte, el hizo lo mismo.

Al abrazarlo, me di cuenta que estaba mi niñero con su atenta mirada hacia nosotros, no le di importancia y cerré mis ojos sonriendo, abrazándolo mas fuerte

- No sabes cuanto me hiciste falta este tiempo. - Lo solté y él me sonrió, como extrañaba ver su sonrisa las 24 horas del día.

- Tú igual me hiciste falta Em, pero mira, ¿Quien diría que nos encontraríamos acá mismo no? Ahora nos veremos muy seguido.

Él era el único al que no me molestaba que me dijera Em.

- Bueno ahora son vacaciones, pero podemos juntarnos, ¿No? - Dejé de mirarlo para ver el auto que tocó bocina, claro que era el señor Mendes.

- Oye tu novio te espera me parece. - Al escuchar eso no pude evitar sonreír.

- ¿Novio? Claro que no, Aaron. Él.. Bueno sólo te lo diré porque sé que no dirás nada. - Su atenta mirada hacia mí se hizo frecuente, yo me acerqué hasta su oído susurrándole, ya que habían más personas ahí y sabía que si lo escuchaban me molestarían luego.

- ¿¡NIÑ..!? - No dejé que terminara de hablar porque cubrí su boca con mis manos rápidamente. - Lo siento, lo siento. No diré nada, pero luego me cuentas mejor ¿Dale?