CAPÍTULO 4:
Me sentí un poco incomoda, como si allí no pintara nada, aunque era la verdad.
-¿Que os parece si dejamos las clases para mañana y hoy damos una vuelta? -dijo Carlos intentando escaquearse.
-Oh si claro, respeto vuestra intimidad...
-¡No que va! Ven con nosotros, estamos un poco locos pero por lo demás no te preocupes...-dijo Carlos a Blas con una sonrisa perfecta.
Caminamos en silencio. La última palabra la dijo Carlos y no nos atrevimos a decir la siguiente. Yo no dejaba de mirar al chico nuevo, Blas, parecía simpático y tenía unos ojos azules, color mar preciosos. Por una parte, se parecía mucho a Carlos, llevaba un gorro de color violeta, pero por otro, mi corazón le pertenecía a Charlie.
-¿Bueno que os parece si vamos a mi casa a ver una película? -dijo interrumpiendo el silencio.
-¿Hasta Alicante? ¿Estás loco?
-Yo ya me he acostumbrado a sus locuras jajaja-dijo Blas guiñando el ojo.
- ¿Pues qué os parece si después de cenar vamos a la playa y nos tiramos al mar por el acantilado?
Iba a hacerle una pregunta absurda pero me callé.
-Como no respondéis lo tomo como un sí. ¡Preparaos y nos vemos por la noche! ¡Ah, recordad, traer bañador! -dijo alejándose de nosotros.
Le iba a decir que había quedado en estar conmigo hasta que llegaran mis padres a casa, pero ya estaba demasiado lejos.
Solo quedábamos Blas y yo.
-¿Vamos a dar un paseo? Yo no me voy a ir a casa tan pronto...-dijo Blas, haciendo que mis mejillas se sonrojaran.
-De acuerdo.
Comenzamos a caminar un camino rojo, que es para bicicletas y peatones.
-¿Dónde vives? -le pregunte curiosa haciendo que se sobresaltara.
-En la región de Murcia. Tengo la casa al lado de Xuso Jones. -me sacó la lengua intentando dar envidia.
-¡¿HAS CONOCIDO A XUSO JONES?! -dije gritando- me encantaría conocerlo, ya sabes, si vas algún día y tienes sitio en la maleta... -le dije.
-Claro... Bueno, y tu... ¿Estas saliendo con Carlos? Hacéis buena pareja...
Noté como mis mejillas se empezaron a sonrojar.
-¿Tú crees?-Sí, sois perfectos juntos...-dijo haciéndome sentir un poco incomoda.
-¿Tienes novia?-me arrepentí de haberlo dicho en voz alta.
-Si... Bueno... No...
-Ya veo que estas muy indeciso.
-Quiero decir, que hace muy poco que lo deje con mi novia -aunque no sabía por qué, me puse muy celosa-le dije que había encontrado a la mujer de mi vida y que no era ella.
-¿Y qué problema hay en eso?
-Pues que era mentira.
Me quedé muy impresionada cuando lo dijo. Se produjo un gran silencio. No me atreví a decir nada en unos minutos.
-¿Vamos a cenar? Vamos, yo invito.
-¿No querrás meterte en la playa con el estómago lleno, no?
-Ven conmigo.
Me tiró de la mano y me tapó los ojos con una venda. Estuvimos un rato andando y me caí unas cuantas veces, pero siempre que caía, Blas también lo hacía conmigo.
-¿Me quieres decir a donde me llevas? Llevamos más de...
-Shh...
Me tapó la boca rápidamente con su mano, haciendo que no pudiera decir nada más.
-Mira Sonia...-me dijo quitando lentamente la venta de los ojos.
Era un lugar precioso, el más bonito que había visto en mi vida. En medio del jardín, estaba situada una mesa de madera. Había velas por todas partes, muy románticas de color blanco y rojo. Estaba rodeado de una especie de toldo de madera y por allí colgaban unas preciosas rosas rojas.
-¡Vaya! ¡Es precioso! -dije mirándole muy sorprendida y alegre.-es increíble como puede haber lugares tan bonitos en la tierra.
Todavía seguía impresionada.
-¿Dónde estamos, si se puede saber?-continúe diciendo.
-En uno de los lugares más bonitos del mundo.
-¿Londres, Dublín, Dubái, Alemania...? - le dije bromeando.
-No, estamos en Murcia.
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Seduciendo a mi profesor [Carlos Marco] EDITANDO
FanfictionEn todos los institutos hay un profesor chapas, y si ese profesor se va del insti, se organiza una gran fiesta... Eso sí, hay que tener en cuenta que vendrá un profesor a sustituirle, y lo peor que podría suceder sería, enamorarte de él.