Baby Stiles

Capítulo 4

Dos, tres, cuatro... Ya había olvidado cuántas veces contó hasta 10 para poder calmarse; al parecer el brujo era más precavido de lo que parecía. Estaban en una pequeña cabaña casi a las afueras de Beacon con una barrera que evita que sus olores se dispersen.

Los chicos y niños desaparecidos estaban asustados y no habían confiado en él en un inicio debido a que sabía sus nombres, pero luego de que les explicara que los iba a ayudar a salir ilesos se le acercaron; incluso gracias a la seguridad que dejaba notar los niños se quedaron con él, sintiendo la protección que necesitaban en ese momento; después de todo eran niños, lastimosamente su relación con los otros tres chicos aun era algo complicada.

-¿Cuándo saldremos de aquí?- Preguntó uno de los jóvenes llamado Darion el segundo adolescente secuestrado; 16 años de ojos azules y cabello rubio muy parecido a Whitmore en sus épocas de niño mimado, había sido secuestrado mientras estaba en una pequeña excursión con unos amigos.

-Mañana por la noche, es luna llena, Tiberio necesita que la luna esté en su punto más alto para hacer su ritual-

-¿Y porque nosotros?- Yoshua , un niño de 7 años pelinegro y de tez blanca con ojos marrón oscuro; a pesar de su edad era muy inteligente; fue el primer secuestrado cuando unos niños de su clase lo invitaron al bosque y lo dejaron allí por un reto.

-Porque estábamos en un punto cardinal  teniendo como centro un árbol antiguo... O mejor dicho lo que queda de él; por su seguridad no puedo darles mucha información-

Stiles se sentó en el piso para acurrucar en sus brazos al más pequeño del grupo, de apenas 5 años aunque parecía de 6, Diero un pequeño pelicastaño de tez trigueña y algunos lunares y ojos verdes que le recordaban a cierto lobo gruñón, era un niño huérfano que se había escapado de su casa de cuidado debido a que lo trataban mal, terminando en el bosque para ocultarse de los hombres que lo cuidaban, era el tercer niño secuestrado.

Mientras que dormido al otro lado de toda esa conversación se encontraba Elias con un año menos que Stiles y una personalidad igual que curiosa pero algo cohibida por no tener hermanos, por lo que siempre estaba solo, con el pelo y ojos negros la piel blanca le hacían resaltar bastante a pesar de usar anteojos, estaba en el bosque descansando luego de que saliera a correr en este como todas las noches cuando fue secuestrado; él fue el ultimo joven en serlo y también el último antes de Stiles en llegar allí.

Mientras tanto luego de que Derek se fuera y le contara todo al Sheriff, la manada recibió la peor reprimenda de sus vidas por parte de un John muy enojado que les reclamó de cómo era posible de que permitieran a Stiles hacer de carnada otra vez y no se cuantas cosas más, se calmó una vez le dijeron que no tardarían en rescatarlo y prometerle que regresaría sano y salvo.

Esa noche Derek apenas y pudo dormir, la preocupación por el castaño era mucha y no podía pensar en otra cosa; cuando su reloj dio las 6 exacto mandó un mensaje a toda la manada.

"Seguiremos con el plan de Stiles, vengan para preparar lo que hace falta"

Todos llegaron  en el transcurso de quince minutos ya que el plan era algo extenso, los símbolos que tendrían que llevar esa misma noche deben estar secos para evitar algún hechizo directo.

Pero por mas que lo intentaran no podían estar tranquilos, porque tenían aún en la conciencia lo que había pasado con el hijo del sheriff y lo que este les dijo al enterarse, a pesar de que no lo pareciera tenía muy claro lo que últimamente le pasaba a su hijo y de cómo su mirada ya no tenía tanta emoción como antes cuando se reunía con ellos y cuando dormía soltaba algunas frases "no soy débil" o de lo contrario "si no estuviera aquí no se qué sería de ustedes"  pero lo que mas les dolió a los jóvenes es que Stiles dijera entre sueños "ya no quiero que me dejen solo"; porque si, el de lunares se sentía solo y su mascara de todo está bien había funcionado con ellos.
 
Pero ya no había forma de cambiar el pasado, y si querían redimirse esa era su oportunidad perfecta y su mayor objetivo: "Mantener a Stiles a salvo ante todo". Si fallaban no sabrían que hacer y la conciencia los atormentaría el resto de sus vidas.

Mientras en la cabaña los chicos estaban empezando a desesperarse, los niños eran los mas afectados no soportaban estar encerrados y el lugar no era precisamente lo mas espacioso  que se diga, apenas y tenía un baño, eso era un alivio, pero no a lo que Justin estaba acostumbrado, un niño de igual edad que la de Yoshua pero de personalidad totalmente opuesta y claro su cabello rubio rojizo, piel bronceada y ojos pardos dejaban muy en claro que lo único que esos dos niños compartían era la edad.

-Stiles no creo poder resistir mas, mi ansiedad quiere regresar-

-Tranquilo Yoshua dentro de unas horas estarás en casa te lo prometo- El pelicastaño le dio una sonrisa tranquilizante pero Justin no soportaba no ser el centro de atención así que hizo lo que siempre hace con sus padres para conseguir algo... Un gran berrinche.

- ¡Yo debería estar en casa!, por favor mis videojuegos no se van a jugar solos; ¡quiero irme ya!-

-Ya basta Justin, llevas haciendo pataletas desde que llegaste aquí hace mas de una semana y media, ya no te soporto-

Ese fue Luis, el mayor de todos los niños con 10 años recién cumplidos y el que se hizo cargo del pequeño Diero cuando llego, con unos ojos azules profundos y pelo negro y algo rizado con un flequillo que tapaba la mitad de su ojo izquierdo.

El era el "encargado" de los niños mientras que para los jóvenes el mayor era Logan con 18 años y un serio problema de liderazgo, pero no lo hizo nada mal considerando lo poco cooperativos que eran algunos a veces debido a sus diferentes tipos de vida, este chico de cabello blanco con negro, ojos marrones y algunos tatuajes era un rebelde con sus padres, de hecho estaba yendo a la casa de su padre luego de una pelea con su madre, decidió despejase un poco caminando a través del bosque pero un sonido le llamo la atención y... bueno ya sabemos donde esta ahora; fue el primero en ser llevado a esa cabaña.

Y llegó la noche a Beacon Hills; la tensión se podía sentir en el loft, mientras que en la cabaña donde los jóvenes y niños había miedo y frustración, ya casi era hora, todos están listos y preparados repitiendo lo que debían hacer, decisiones y acciones serán tomadas y las consecuencias tendrán que ser enfrentadas; este prefacio llega al final y la verdadera historia esta apunto de comenzar.