Las calles están llenas de gente, cada quien con su historia a cuestas. Algunos ni siquiera miran hacia el frente, muchos miran hacia abajo y me gustaría pensar que miran sus pasos pensando de donde vienen o a donde van, yo a veces los miro y me imagino que pueden estar pensando y luego me digo a mi misma - son historias rodantes que nos cruzamos cada día, historias que tal vez nunca nos volveremos a cruzar, historias que nunca tendremos el privilegio de leer, simplemente historias -.
Llevo mis audífonos con la música en el volumen al máximo, parece que en cualquier momento va a empezar a llover y olvide mi paraguas en casa, acabo de salir de clases y todavía falta camino para llegar.
Voy a mitad del camino cuando empiezan a caer las primeras gotas - no lo puedo creer justo cuando no traigo mi paraguas llueve - las gotas son pocas y pequeñas así que no me apresuro, respiro hondo y trato de no pensar tanto en la gente a mi alrededor.
Justo llego al paradero y empieza a llover más fuerte, la gente corre huyendo de la lluvia y yo simplemente los miro, bueno solo de vez en cuando, luego vuelvo a mi mundo en la música, - rayos llego mi autobús el 132, me tengo que ir - pienso para mi interior mientras saco la tarjeta del pasaje, como si a alguien le importara que yo me fuera o me quedara; me subo y me siento en la ventana para ver llover - yo se, como una de esos videoclips dramáticos de las canciones - y espero para llegar a mi casa a almorzar.
Otro viaje sola a casa y aunque estuviera con él igual me sentiría sola, pues ya nada es como antes, tal vez yo si - aunque solo es mi punto de vista- pero él ha cambiado mucho, ya no me habla, ni yo a él, los caminos de vuelta a casa son más fríos que antes, él piensa en lo suyo y yo en lo mio; pero a veces extraño saber lo suyo, tal vez ya no confía en mi o yo no en él y me sigo preguntando ¿Qué hicimos para llegar hasta este punto?.
Alguien me saca de mis pensamientos, solo es un joven que se sienta a mi lado, hago lo de siempre, lo miro, decido que es guapo, me imagino como seria una conversación con él, me resigno a que nunca pasara y vuelvo a la ventana.
Se acerca mi paradero así que me levanto, me acerco al timbre y después de que el bus se detiene, me bajo, solo queda caminar algunos metros para llegar a mi casa,- ¿ Me pregunto si él ya habrá llegado?- cada vez que llego y él no esta me preocupo, pues me pongo a pensar si de pronto le paso algo, siempre espero que este bien, pues aun así lo quiero.
Al llegar a casa parezco un alma en pena, no me di cuenta en que momento me moje tanto - eran unos cuantos metros nada más -, llegue derecho a mi cuarto, tire todo encima de la cama y me metí al baño, me quite toda esa ropa mojada y me bañe con agua caliente - todo lo que deseo después de mojarme bajo la lluvia -. Aquí es donde mi monótona tarde empieza otra vez.
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Historias rodantes
Fiksi RemajaAhora estamos juntos pero cuando todo esto empezó solo eramos historias rodantes ... Estamos juntos en esto, por lo que pasamos, por lo que sufrimos, por lo que sabemos, por esta lucha que decidimos empezar juntos. Pasamos de ser historias rodan...