Tan Sólo Vecinos

Recuerdame I

Un nuevo día

27 de diciembre, el día era frío y nublado, pero, para Neji no era ninguna escusa para no darle un buen regalo de cumpleaños a su querida prima.

Hasta hace poco tiempo, el odiaba a Hinata, ocasionando casi matarla pero, si no fuera por Naruto, el seguiría siendo el mismo.

El castaño subía las escaleras con una gran sonrisa, en sus manos llevaba un gran pastel con unas velas en forma del número 15.

Entro a la habitación de la peliazul sin hacer ni un solo ruido ya que aun se encontraba dormida.

-Hinata-sama- dijo ya bastante cercas de ella.

-Cinco minutitos mas- se quejaba la ojiperla aun posada en la cama.

-¿Entonces que se supone que haga con esto?- decía en un tono divertido pero nostálgico.

-Neji...nii...san- lentamente se levantaba hasta quedar perpleja por lo que su primo traía entre sus manos.

-Felicidades, Hinata-sama-

...

El despertador sonó pero Naruto ya estaba despierto, no había podido dormir pensando en su cita con la pelirosa.

Lentamente se paro de su cómoda cama y se dirigió al baño, tomo una ducha y, después de eso, paso un buen rato escogiendo la ropa que se pondría el día de hoy.

Constante mente miraba el reloj, no quería llegar tarde a algo tan importante.

A su hermoso conjunto no le podía faltar nada, era perfecto pero, para su mala suerte, hacia frío y tenía que llevar un buen abrigo.

Naruto estaba muy concentrado en lo que hacia cuando se escucho que algo callo al suelo provocando que se asustara, solo un poco.

-Esto es...- dijo al momento de recogerlo, ya que era el collar que siempre traía puesto.

Paso un rato contemplándolo, no apartaba la mirada.

-Siento que algo... Se me olvida- decía entre susurros- ¿pero que es?- se lo volvió a colocar en el cuello.

Bajo por las escaleras hasta llegar a la puerta, se puso su abrigo y abrió la puerta.

-¿Puedo saber a donde vas?- Jiraiya dijo en tono molesto pero con un tono juguetón.

-Pues para- lentamente voltio a verlo -una cita-

-¿Y puedo saber con quien?- cruzo los dos brazos.

-Con Sakura- dijo aterrado ante la actitud del peliblanco.

-¿Sakura?- empezó a pensar -pero si es el-

-Lo siento ero-senin- interrumpió Naruto gritando ya desde fuera -pero no quiero llegar tarde- el chico se fue corriendo.

-Naruto- fue lo ultimo que dijo Jiraiya antes de cerrar la puerta.

...

Ya habían degustado un gran pedazo de pastel hací que Neji dejo sola a la Hyuga para que esta se arreglara.

Tomo un baño, escogió las mejores prendas de su armario y arreglo su cabello con su clásica melena suelta.

Y no podría olvidarse de ponerse el collar que mas apreciaba, ya que mas que un simple adorno, era un símbolo de algo que no se puede explicar sólo con simples palabras.

-Hoy es el día...- susurraba mientras se miraba al espejo.

...

Naruto llegaba a la casa de la Haruno, se sentía nervioso, no podía ni tocar el timbre para avisar su llegada y que esta al fin saliera.

Se armo de valor y por fin timbro, pasaron unos cuantos minutos antes de que se abriera la puerta y, en su momento, ahí estaba, Sakura, luciendo un leve sonrojo entre una pequeña sonrisa.

-Sa-sakura-chan...- solo pudo pronunciar el nombre de la chica mientras la miraba.

-Deja de mirarme- aun sonrojada decía.

-Luces muy hermosa- aun perdido en la chica habló.

-Gracias, Naruto...-

"Naruto-kun" el sonido de la voz de Hinata resonaba de nuevo en su cabeza.

-Bien vamos- dijo Sakura mientras tomaba la mano del rubio y empezaba a caminar.

-S-si- dijo el Uzumaki mientras la seguí.

"¿Por que siento que algo se me olvida?"

Continuará...

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