Sábanas de algodón

6eis Veces 6esis

Oh querido Seis, cuanto amor y odio en un solo dígito. Si, cuando rencor en tu resultado amargo y desgarrador. Oh mi Seis, que cruel y dulce tu manera de disolverte en mi ser; siendo pieza clave en mi rotundo fracaso. Seis más seis más seis igual a mi nombre; igual a mi desdicha que se expira como tús ganas de seguir sumando recuerdos junto a mi. Mi amado y querido Seis, que sabio y culto eres, me torciste la vida tratando de descifrarte a fondo y si, ahí, precisamente ahí terminé yo; en el fondo de dudas y preguntas que atormentan mi masa ósea al cubrir mi soporte en donde descansa mi alma. Seis veces seis igual a dos con la finalidad de terminar en uno o mitad. Qué tortura mi amado Seis, nunca te olvidaré jamás, me enseñaste que las respuestas a tu codigo solo las tienes tú y aún siendo tú el protagonista de mis desvelos, te admiro. Si, te admiro por tu delicadeza de hacerme un número igual, pero con mejores resultados. Si, querido Seis, dejaste huérfanos a cientos de bombeos y aquel, ya difunto se ha retirado con orgullo, aunque con muchos cráteres de esperanzas sigue en muletas a tratar de volver de esa guerra fatal y sangrienta. Seis, cuanto te odio por amarte de esta manera, pero más son mis ganas de tener los resultados que siempre quise obtener. No pude domar tú pequeña y frágil hipótesis y mucho menos tú pensar que tanta agonía trajo a mi pedazo de tierra. Claro que si mi Seis, te extraño pero lejos de mi y de mis resultados futuros, pero aún así, pido porqué tus resultados sean los mejores del mundo. Si Seis, fue una bella y larga jornada de pequeñas mini-películas que habitan en dondequiera que voy. Mi Seis, mi hermoso y precioso número, cuanto te adoro. Pero sin ti, los resultados a tus largas horas de descifrarte a ti mismo, me hicieron comprender que el Seis es solo un Seis y que tú eras el verdadero resultado que quería obtener. Cuantas horas ganadas, perdí.. Me retiro, pero no por mucho tiempo, amado. Sigue enseñando resultados y ten en mente que quien descifre tu codificación, sea el número que aunque lo restes o sumes, siga dando a el mismo valor. Te amo mi Seis, pero en el profundo silencio de mi bullicio mental...