Deja Vu

Blondie Girl.

Cuando el reloj marcó las 10:35 De la noche, en un pequeño espacio del mundo, en un lugar entre cuatro paredes... existía una chica, una chica de cabello rubio de color caramelo con tonos de color rubio, un poco castaño claro, haciendo que se resaltasen más sus risos.

Sus ojos, azules como el mar, azules como el cielo, con tonos grises, con verde al rededor de sus pupilas... soltaban lágrimas, lágrimas que derramaban cada uno de sus sentimientos, pensamientos y comentarios que ha guardado por toda su vida...

La chica, sin escape, en la noche, sin saber que hacer se dejaba guiar por las letras y ritmos de las canciones. Bailaba con el viento y la luz de la luna en plena noche. Intentando controlar cada uno de sus más grandes temores...

Nadie sabe, lo que ha sufrido, lo que ha resistido, por lo que ha persistido.. Nadie sabe, lo difícil que fue y es su vida, Nadie sabe lo que puede ocultar una persona, que parece ser feliz pero realmente por dentro esta muerta. Nadie sabe, el cementerio de mentiras, Sentimientos muertos, Comentarios, pensamientos, todo tipo de cosas incontables.

Las cenizas que aún tiene, que no se han podido ir con el viento.

Aún, con dolores, que la queman cada vez más y cuando al fin piensa que las llamas están apagadas...

Siempre vuelven a quemarla.

Siempre esperando a que sean las 11:11, para pedir estar con los seres queridos que perdió, por razón natural, y otra por la maldad que puede tener una o más personas, estar allá, en el cielo, con ellos.

O, simplemente, estar con esa persona que increíblemente, ha robado su corazón. Esa persona que lo sabe todo, esa persona que la escucha... esa persona, que por algún motivo del destino, ahora, está allí para ella.

O, que simplemente su vida vuelva a ser como Antes. Que ella regrese a ser La Niña inocente que veía todo con ternura y cariño, la que veía todo se color de rosas...

Porque ahora, ella es solo,

Un muerto en vida,
Sin nada que hacer consigo misma.