Destiny.

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Suspiré por última vez. Observando las
Gotas caer en la ventana, cómo caían y caían cada vez más, mientras que yo dibujaba algún tipo de dibujo imaginario en la ventana.

Iba de camino a casa, escuchando una de las canciones de nuestra banda favorita, la mía y de el chico del autobús. Hacían días en que no me respondía, días en que no hablábamos, para mí ya se hacía un año.

Hasta que sentí unas manos en mi cintura, me volteé y me di cuenta de que allí estaba él. Sonreí, y lo abracé, lo abracé como la primera y última vez en verlo. Coloqué mis labios sobre los de él, dandole un beso al fin. ¡Como no extrañar a tu único confidente! Los días pasaban lento sin esa persona que lograba hacerme momentos felices en mi vida.

Íbamos escuchando música, yo leía mi libro favorito, hasta que el empezó a leerlo también conmigo. Sentí su mano rozar con la que yo tenía libre, quería agarrarme la mano, así que permití que lo hiciera y si el otro paso para poder entrelazar los dedos.

Coloque mi cabeza suave y delicadamente en su hombro, leyendo el libro junto con el mientras llegaba a casa. El tiempo seguía congelándose mientras estaba con él. Me alegro de ello, me alegro de estar con él, estoy agradecida por volverlo a ver otra vez.

Tal vez empiece a creer en el destino.

Deja VuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora