Mi Chico De Cabello Azul (Trollimba)

Capítulo 1💫

Siempre eh soñado con aquel cuento de fantasía en el que llegaré a enamorarme y seré correspondido... Lamentablemente solo son sueños y esperanzas falsas... Ni siquiera sé si soy la persona correcta para poder tener aquel corazón de ese chico pelinegro

TimbaVk
04/06/19

Un peliazul se encontraba en su cuarto escribiendo en un diario por así decirlo, aunque el ni siquiera sabe lo que escribe... El solamente quería que su corazón fuese correspondido pero eso nunca pasará ya que aquella persona que el ama no corresponde a sus mismos sentimientos.

–No entiendo que hice mal... Por qué me tuve que enamorar de ti... Ni siquiera soy como el... Solo soy una persona más en esta vida con problemas amorosos– Aquellas palabras siempre traían al peliazul confundido, claro el solamente necesitaba algo o alguien que pudiese entenderlo, aparte de la pelirosa.

Palabras falsas no te atrevas a decirlas, simplemente te dañaran, te harán sufrir y sobre todo saldrás lastimado...

–¿Timba? ¿Todo está bien?– Un pequeño niño saco al peliazul de sus pensamientos, al parecer el sabía lo que realmente le pasaba al de gafas.

–Perdona... Solo pensaba... Es todo... ¿Necesitabas algo pequeño Exi?– Pregunto el peliazul para guardar el cuaderno en un cajón y sentarse en su cama.

–Necesitaba que me ayudarás... Pero veo que te sientes mal... ¿Es por Trollino no es así?– Se sorprendió un poco el peliazul por las palabras del niño y aquel nombre Trollino, su amor platónico soñado, pero también como es que lo sabía, la única era Tina.

–¿Acaso Tina te dijo algo? Por favor dime qué tú fuiste el único que lo sabe...– El peliazul cada vez más entraba en pánico y el niño solamente soltaba pequeñas risas para dejarlo más confundido.

–Te eh observado y tú miras a Trollino con unos ojos de amor, pero te duele el saber que nunca te corresponderá, deberías ir con el y decirle tus sentimientos– Por primera vez el niño tenía razón... Debería dejar de ocultarlo y mejor decirle... O si no sería tarde.

Vamos... Es tu oportunidad de poder decirle a Trolli que lo amas... Pero yo no soy competencia para su mascota, se ve que lo quiere mucho... Yo solo soy su amigo...

–Mejor no... Ni siquiera soy una competencia para el...– Palabras que tenía que tragar para no poder fracasar en distintos aspectos, el siempre estaba consiente de sus errores... El peliazul lo único que tenía era aceptar la situación.

–Timba por favor, piensa también en el daño que te estás haciendo... ¿Estás seguro de querer seguir sufriendo a cada misión que vamos?– Preguntas, solo preguntas y frases por parte del menor, y tenía razón, solo se estaba lastimando a sí mismo y a su corazón de porcelana.

–Algun día le diré Exi... Por el momento quiero mantenerme neutral y pensar que Trolli es más feliz con Mike que conmigo, además soy un asco y lo sabes–Otra vez el peliazul comenzó a bajarse la autoestima con su carácter, físico y emocional, el tenía su mente tan quebrada y su corazón.

–¡¡Timba no digas eso!! Tú eres el mejor de todos, eres un gran amigo, compañero y me gustan tus bromas... Por favor no te dejes derrumbar por aquella depresión... Tú eres fuerte y jamás pienses que eres una carga en el equipo, no todos somos buenos exploradores, mírame a mi soy un fracaso en el parkour–Las últimas palabras bastaban para que el peliazul soltara una leve risa y abrazara al menor, hace tiempo que nadie hacia sonreír al peliazul, ahora era momento del menor en poder apoyarlo y ayudarlo en lo que fuera.

–Gracias Exi, me alegraste mi día, eres tan fantástico, todavía me preguntó cómo es que tú y Tina llegan a alegrar mis días– Dijo el peliazul para ponerle sus gafas a Exi, su relación de ambos era muy divertida, eran como hermanos y sobre todo mejores amigos.

El miedo... Aquella sensación me tortura por las noches... Cada día las misiones son más peligrosas para el equipo... En especial para el pequeño Exi... ¿Y si le llega a pasar algo? Jamás me lo podría perdonar... Te protegeré...

–¿Timba...? ¿Esta todo bien? Estas bastante pálido y tienes escalofríos ¿¡Timba!?–Las últimas palabras que escucho el peliazul para luego caer al suelo inconsciente, rápidamente el menor fue por ayuda, estaba asustado.

No... No puede ser otra vez...

Todo se había vuelto oscuro, aunque después de un rato unas luces le lastimaron la vista, ¿Cuánto tiempo se había quedado dormido...?

–Timba... Por favor despierta...– Aquella voz provenía de la pelirosa que estaba al lado del peliazul, pero estaba asustada, con nervios y sobre todo apunto de llorar por el contrario, era su mejor amigo y sobre todo su gran hermano.

–Tu tranquila, el va a despertar, pero... No es la primera vez que le pasa...– Palabras provenientes de un rubio, un perro que a veces llegaba a odiar al peliazul.

Mientras tanto Exidax estaba en la sala viendo la televisión y jugando con las gafas del peliazul, lo extrañaba... Necesitaba estar con el... Incluso en ese momento el extrañaba su voz y sus bromas que hacía a cada rato, también sus chistes malos, eso hacía único a Timba... Al menos para el menor.

–¿Por que todo lo que amo siempre tiene que sufrir...?– Se preguntó a si mismo en voz baja para luego comenzar a sollozar, se sentía culpable de una u otra forma.

–Exi... No llores, el se va a recuperar, reconozco la fuerza que tiene para poder seguir adelante evitando los problemas y situaciones más difíciles, aparte... ¿No confías en el?–Esa pregunta por parte del pelinegro al menor lo dejo un poco más calmado y relajado, en verdad se preguntaba que veía Timba en Trolli.

–Si confío en el... Pero ya van varias veces que el se desmaya, se siente mal, tiene dolores de cabeza y rara vez llega a toser sangre... Algo tiene y necesito saber qué es para salvarlo...–Menciono el menor para agarrar con fuerza las gafas del peliazul.

No me dejare caer con esta enfermedad... Solo es temporal... De seguro pronto me voy a reponer y todo estará como antes, yo fingiendo ser feliz...