MISA
La mansión que se alzaba delante de nosotras, me inspiraba demasiado respeto, era oscura, casi fasmagorica. Ya me había puesto sobre aviso cuando vi al conductor. Una parte de mi, se esperaba lo peor, esperaba que detrás de esa puerta apareciera una especie de monstruo o algo peor.
-¿Es aquí?-preguntó Mika curiosa, rodeé los ojos.
-¡No! ¡Que va! ¡Es que hemos venido aquí, pues para pedir un vaso de agua!
-¡Ya lo e pillado!-reclamo Mika haciendo un puchero propio de una niña pequeña.
Rodé los ojos y le di dos sonoros golpes, esperando a que alguien nos abriera. No se cuanto trascurrió, pero la puerta se abrió, las tres nos miramos mutuamente, y nos quedamos fuera esperando a que el dueño de la mansión, nos invitara a pasar. Pero nada, cuando nos adentramos, un escalofrió involuntario se apodero de mi, no había nadie en la puerta, solo una inmensa oscuridad. Aterrorizadas, nos dimos la vuelta esperando a salir, pero estaba atascada.
-¡Mierda no se abre!-maldije dándole golpes a la puerta, pero no pasaba nada.
-Vale...inspiremos...-dijo Shakura intentando mantener la calma, como era de esperar no obtuvo mucho resultado.
-¡SOCORRO, ABRAN LA PUERTA, ABRAN LA PUERTA!-grito Shakura dando golpes a la puerta de roble.
Le iba ayudar, pero un sonido que provenía del interior de la mansión, nos puso en alerta, suspirando, cogimos las maletas y nos adentramos en el salón.
Era bastante curiosa, muy antigua, pero magnifica, parecía que los que Vivian aquí, conocían de antemano la época antigua. Mis hermanas y yo miraban fascinadas todo a su alrededor, era todo tan grande que me quedara embelesada. Al contrario de nuestro departamentucho (pero muy acogedor) Era un cambio bastante grande.
Shakura se paro en seco, en lo que seria el salón, miraba algo con cara de horror, curiosa dirigí mi mirada hacía donde miraba. Ahogue un grito, cuando vi el cuerpo de un muchacho de pelo rojo, que dormía...o eso quería pensar en un sillón de color verde. Tenia la pierna alzada y la otra estaba estirada.
Mis hermanas y yo nos mirábamos, intentando leernos la mente, pero fue mi hermana Mika que lo preguntó con un tono bastante extraño:
-¿Quién ese ese?-preguntó curiosa, mi hermana y yo le miraron como diciendo: "¿Enserio?"
-Yo que se, pero a lo mejor nos puede ayudar-dijo Mika con seriedad, pero no paraba de mirar a ese chi... a esa cosa...¡a ese algo!
-¿Quién se acerca?-preguntó Shaku curiosa.
Las tres estábamos observando aquel chico que parecía dormir plácidamente, sin saber que hacer, di un paso adelante, cogí lo que sería mi paraguas y toque el cuerpo con él.
-¡Oye, disculpa!-dije atizándole con el paraguas suavemente.
Como no me hacía caso, deje el paraguas en el suelo y me encamine hacía el sofá. Mire de nuevo el cuerpo, y con mis manos, lo balancee esperando a que se despertara pero nada.
-¿Amigo? ¿Tío? ¿Cosa?
De repente note su cuerpo frío y grite, si, grite, mis hermanas me miraron sin entender nada.
-¿Qué pasa?-preguntó Mika preocupada, ambas se acercaron a mi.
-¡Que este tío esta muerto!
-¡Venga ya! ¡Sera tu imaginación!-sentenció mi hermana Shaku, pero cuando coloco su mano en el cuerpo frío, grito.
Mi hermana rápidamente se puso a mi lado, asustada. Mikaru, se quedo pensativa unos segundos y esbozo una sonrisa maliciosa.
-¿Esta muerto? ¡Bien! ¡Así no pondrá resistencia!-dijo mi hermana desbotonándose la camiseta, horrorizadas agarramos del brazo de Mika y la pusimos a nuestro lado.
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OCÚLTATE
Fanfiction"NUNCA MIRES ATRÁS" Tres sacrificios, por culpa de una lealtad. Tres chicas huérfanas y curiosas. Una invitación extraña. Una mansión misteriosa en el bosque. Seis chicos misteriosos. Un misterió que resolver. Una carta que jamas llegara. Y un solo...