Mocosa insolente, como se atreve a intentar ponerme celoso, a mi, no se da cuenta que yo tengo a la chica que quiera que ella es solo una más del montón, que se valla a la mierda, estoy de acuerdo que tiene buen cuerpo, una boca y unos senos de impacto, pero no es para tanto, sigo repitiéndolo una y otra vez en mi cabeza, no he dejado de pensar en ella, por las noches al intentar conciliar el sueño, en vez de las pesadillas que regularmente llegan a mi, está ella, con su carita de ángel y su bendito cuerpo de infarto, la forma en que gime, como de deshace en mis manos cuando tiene un orgasmo.
Ahí está de nuevo, en vez de intentar conciliar el sueño de nuevo y terminar nuevamente frustrado, exitado, calmando mis ganas con duchas frías, decido mejor calmarme en el gimnasio y enloquecer en el trabajo.
La mañana del viernes llega muy pronto, con una maldita noche de mierda, sin poder dormir mucho, Alonso entra en mi oficina, con esa estupida sonrisa dibujada en su rostro, no estoy de humor para soportarlo, toda la semana a estado aquí molestando, quiere que le de detalles, como a el le encanta contar su vida privada, quiere que lo haga yo también, no me apetece. Solo le dije que era asunto terminado que dejara de joder, con eso del cuento de hadas, de que no todas las mujer son iguales, que tenía que cambiar, no me contuve y le conté, que ella tenía novio, que pensaba en otro mientras estaba con migo, claro no iba a aumentar su ego, diciendo que era el, el otro hombre.
-¡Buen día, amigo! No me vas a creer a quien encontré esta mañana en la casa de mi novia.-intento parecer indiferente, pero sé perfectamente de quien me habla.- Y valla que la hiciste enojar, por qué prácticamente me dijo, que no eras nada para ella.
-¡No me digas, dime algo que no sepa!- sonríe, se que sabe algo, el muy imbecil se hace el interesante.- ¿Tienes algo más que decir? Deja ya tu jueguito, di lo que tengas que decir.
-¡No tiene ningún novio, amigo! ¡Te tomó el pelo y tú caíste redondito!
-¿De que hablas, quien te lo dijo?- para que pregunto, yo sé quién se lo dijo, por supuesto Sofía, esta noticia, creo me ha vuelto a la vida, entonces lo dijo para molestar, claro no quería quedar como tonta, después de como se había comportado la noche anterior, por qué son tan complicadas las mujeres.
-Obviamente, Sofía. No quería decirme nada, pero cuando vio que se puso muy nerviosa cuando le pregunté por ti, supo que la historia que le había contado, era verdad.
-¿Que historia?
-Pues esa, de que tú eres un hombre bueno, que ha sufrido mucho, que mereces una buena mujer, como su amiga, que estás bastante loco, que no he tenido tiempo libre en toda la semana, por qué me has puesto a trabajar como un loco y que todo era por qué su amiga te había confesado que tenía novio, ella por supuesto no se lo creyó, decía que su amiga ni hacia esas cosas, pero después de ver su reacción, cuando le dije que había revisado las cámaras de seguridad, palideció y casi me come.-sonrió y me relajo en mi silla-¡Estás en un serio aprieto, amigo, si te dejas esa mujer va a ser tu perdición, aún con todo y tus secretos.
Mi cabeza está más allá, necesito tenerla, me importa muy poco si quiere o no, pero ella va a terminar rendida a mis pies, pidiendo, suplicando por más, mucho mas, así tenga que obligarla.

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Secretos
RomanceNia una chica estudiosa y muy inteligente.. Su imaginación la lleva a una situación donde nadie la podría salvar del insaciable y poderoso hombre de negocios al cual se enfrentará.. Además de muy guapo y terriblemente imponente, tiene un secreto que...