Capítulo 8

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Nicolas Pov:

En cuanto recibí el llamado de Mia, creí que era por lo de está mañana, pero no fue así. Mi pequeña Mia me necesita, aún no se cuando mi mente empezó a llamarla "Mi pequeña Mia" a una pequeña parte de mi le gustaba; aunque la otra parte sabía que es imposible, no solo porque tomé los ámbitos, si no que también son los 12 años que nos llevamos.
Salí  lo más rápido posible. Cuando llegue ella corrió a abrazarme, escucharla llorar era algo que me rompía el corazón; ella me contó todo acerca del pronóstico que dió el doctor sobre la enfermedad de su madre.
La invité a tomar un helado, se que necesitaba desahogarse, fuimos en mi auto; verla perdida en sus pensamientos con  mirada en la ventana, era algo hermoso. Llegamos a la heladería, pedimos y nos sentamos en unas mesas; Mía empezó a hablar:
-Padre Nicolás, tengo miedo, no quiero perderla- Termino de decir eso y las lágrimas comenzaron a caer de sus ojos.
-Princesa, tranquila, todo va a estar bien. Yo estoy y voy a estar siempre con vos- Verla llorar así me rompía el corazón, me acerque y la abrace. De a poco dejó de llorar y le dije:
-Mia, vos podés llamarme Nicolás, no es necesario que me digas Padre- Se quedó pensando en lo que le dije
-Padre.. digo, Nicolás, perdón por lo de esta mañana. No me comporté bien, perdón-
-Mia, ya está, quedó en el pasado, tranquila-
Pasamos al rededor de dos horas hablando en la heladería, hasta que sonó mi celular:
*-Hola, ¿Quién habla?- pregunté, porque no tenía agendado el número.
*-Nicolás, soy Carmen, ¿No te acordás de mi?-*
*-¿Carmen Gómez?-*
*-Si Niqui, soy yo. Decime que no te hiciste cura-*
*-Carmen. Si, soy sacerdote, en este momento no puedo hablar, estoy con alguien que me necesitas-*
*-Bueno Niqui, después hablamos lindo. Besos.-*
*-Chau Carmen, cuídate-*

-Perdón Mía, era mi ex-novia. ¿Querés que ya vayamos yendo?-
-Dale Nico, pero antes, ¿Podemos sacarnos una foto? No pienses cualquiera, solo es que me gusta sacarme fotos y bueno eso, si no querés no pasa nada-
-Dale Mía, saca una foto- Verla a Mía hablando rápido porque estaba nerviosa me daba demasiada ternura y risa.
Saco la foto y nos fuimos al auto.
Agarré por toda la costa, y se me ocurrió una idea:
-Mia, conecta tu celular al estéreo, quiero escuchar tu música- Mis comenzó a buscar una canción y la puso. La canción elegida es "Tratame Suavemente" de Soda Sterio, una banda que yo amo y al parecer ella también.
Esa canción era perfecta para ella, esa canción era ella. Terminó la canción y fue imposible no mirarla, sonreírle y acomodarle el pelo tras la oreja.
La deje en la casa, antes de bajarse del auto me dijo:
-Gracias Nicolás, en serio.- Me abrazo, me dió un beso en la mejilla y bajo del auto.

Termine el día pensando en ella.

Mi Amor ImposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora