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Cuando intento no caer es lo único que sé hacer. 

Escapar es la única forma.

 Ven, rescátame.

Cógeme de las manos y ayúdame a sobrevivir, porque rogar es lo que puedo hacer.

Escucha los gritos, su llanto desgarrador.

Por eso, ven, atrápame.

Le haces daño.

¿Es qué no lo ves?

Gritos.

Palabras.

Gritos.

Palabras.

Ven y ayúdame de una vez.

No huyas, sus palabras se van.

Vuelve, él ya sé va.

Abrázalo, quizás es lo que quiera...

Papá... ¿Cuánto tiempo más tendré qué aguantar?

Te quiero...

¿Es qué no lo ves?

No te es suficiente mi amor...

Por eso, ahora me marcharé.



Cartas para papá Donde viven las historias. Descúbrelo ahora