Capítulo 5

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Hoy era el día.

El día en que veríamos de nuevo a Max y a ________.

Yo estaba algo nervioso, no imaginaba volver a verlos. Bueno, sí lo imaginaba, pero esa posibilidad se veía tan lejana...

Me encontraba viendo la televisión en la sala, era temprano y aún quedaban muchas horas para mentalizar lo que haría y diría. Aunque mi otra opción era sólo despistarme o decirle a la mamá de Matías que me recogiera en el estacionamiento luego de todo.

Pero era más que obvio que no pasaría desapercibido.

Mabel seguía en su habitación en una llamada teléfonica con ________ que llevaba más o menos una media hora. Ambos seguíamos en pijama y por lo que vi, mi gemela sólo había bajado por un bote de Nutella y la bolsa de pan tostado. Ella estaba bien con eso.

Lo que me estaba poniendo nervioso más que nada, era el hecho de que en todo el tiempo que Mabel y ________ hablaban, entre ________ y yo, aún no había contacto. Fuera teléfonico o lo que sea.
Mabel no insistía en pasarme el teléfono y yo tampoco, pues suponía que para ________ sería incómodo.

Ay, ¿por qué me siento tan extraño?

Estas últimas horas no he dejado de pensar en esas dos personas que hoy vienen desde Gravity Falls hasta aquí, California.
No voy a mentir, pensaba más en ella que en nadie.

La idea de volver a tenerla cerca de mí me estaba carcomiendo y no entendía porqué.

Sí, recuerdo vagamente lo que alguna vez pasó en Gravity Falls, eso era algo que no negaría. Recordaba los momentos lindos cuando todo era misterio y mounstros que vivían por ahí... cuando el tío Stan nos hablaba de cosas que para nosotros aún no tenían sentido -como eso de las abejas y la flor- y cuando sólo me dedicaba a resolver los misterios.

Pero luego ellos entraron en escena. Más específicamente, ella.

Recordaba esa fiesta de fin de mes, recordaba a esa tierna niña de 12 años, con su vestido azul, sus torpes pasos de baile y esa linda y contagiosa risa cuando le pisaba o ella a mí.
Recuerdo con exactitud la vez que nos conocimos. Un chico la agarró del brazo muy fuerte, y gracias a que Soos me había dejado ahí, sólo por irse con esa chica bonita, tuve el valor y ansiedad de hacer algo para distraerme. Y al parecer el destino me puso en frente a esa niña de ojos encantadores que derritió mi corazón en un instante fugaz. Entonces me decidí a quitarle de encima a ese tonto que la tenía agarrada con brusquedad.

Cómo olvidar esa chispa tan bella en sus ojos cuando me vio y suspiró de alivio.

Cómo olvidar esa hermosa sonrisa al decirme su nombre.

Y claro, cómo olvidar esos nervios que me estaban matando.

Pero tristemente, sí los había olvidado. Por estúpido decidí tratar de borrar de mi mente todos aquellos invaluables momentos que me llevé con ella. No sólo porque pensaba que no la vería más, sino porque tenía miedo de romperme, porque sabía que ella no estaría ahí para repararme.

También recuerdo a Soos... con él había dejado el contacto al igual que con todos los demás.

Porque si dejaba atrás mi memoria de Gravity Falls, la dejaba toda.

Pero al parecer no fue así. Tal vez nunca lo fue, porque logré recordarla con más claridad que nada, y eso me sorprendió.

Mabel seguía en su habitación y no sabía porque mi ceño se fruncía pensando que ________ no quería hablarme, ya que por algo Mabel nunca me había pasado el teléfono si quiera para enviarle un saludo o algo.
Ni ella había insistido en que les dijera alguna cosa.

Conquistándote de Nuevo (Dipper y tú) #Libro2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora