Hoy habías venido a mi casa, trajiste unos cuantos óleos y pinturas.
Estuvimos pintando cosas comunes, plasmamos árboles, arbustos, frutas, copas, etc.De pronto, mi mejilla derecha estaba cubierta de color rojo, gracias a ti y tu pincel.
Te devolví el favor, terminaste con la frente, y parte de tu nariz llenas de pintura amarilla, seguimos pintandonos el uno al otro, hasta que terminamos bañados en colores.Al final, sellamos nuestro tipo de body art con un beso, un lindo y algo desagradable beso que se convirtió en purpura por la combinación de la pintura en nuestros labios.
Corrimos pintados por toda la casa, entre risas y manchones, cada que me atrapabas me dabas un beso, y ese era motivo para seguir huyendo de ti."Tu eres lila.
Y te gusté porque yo era azul.
Pero cuando me tocaste me convertí en un lila cielo.
Y tu decidiste que el púrpura no era para ti"...