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Movía mis dedos sobre la mesa una y otra vez.

Mis amigas me habían abandonado, estaba sola en una de las tantas mesas de la cafeteria.

Varias cosas pasarían en el transcurso de los días, mi primer aniversario anual con Max sería pronto, la fiesta de Keyla se celebraría el fin de semana.

Natalia había estado pegada a Max como un chicle durante la primera parte del día, por suerte Mae la distrajo un absurdo juego de su celular, Keyla hablaba sin parar de su sorprendente fiesta, incluso tenía una lista de lo que debía tener para ser perfecta.

Nada muy interesante había ocurrido en este simple viernes, además de las numerosas tareas que ya teníamos para dentro de unos días.

-Hola lindura.

-Hola Max- toma asiento frente a mi, su rostro es iluminado por su característica y encantadora sonrisa.

-¿Todo bien, Dawn?

-¿Por qué no lo estaría? mis amigas y novio me abandonan justo en la hora del almuerzo.

-Entonces es por eso.

-Si, ¿por qué? ¿debo preocuparme por algo mas?

-Para nada.

Un silencio se forma  entre ambos, pero no de esos agradables, sino incomodo. Nunca antes había pasado esto en nuestra relacion, en realidad nunca parabamos de conversar.

-¿comiste algo, nena?

-Si.

No es verdad, no he probado bocado desde que salí de mi casa.
Algo dentro de mi me dice que las cosas no estan bien, y no me refiero a las insistentes notas de Aurel, hablo de Max, no siento esa conexión de siempre.

Podía sentir su mirada sobre mi, sé que quiere que le hable y bese como de costumbre, pero mi humor no ha sido el mejor, la presión en mi pecho es gigante, la atensión que le ha dado a Natalia durante todo el día me aturde de manera estupida.

Obviamente confio en él, sé que no me defraudaría, pero Natalia... esa chica no me da buena espina, su intensidad con Max me enferma.

Max se levanta y se sienta a mi lado, pasa su brazo alrededor de mi cintura y me apega a él, el olor de su perfume y olor propio de sí mismo invade mi nariz, con su otra mano acaricia mi rostro, sus ojos café miran los mios atentamente.

-Te amo.- susurra cerca de mi oido.- me vuelves loco nena.

Junta sus labios con los mios de forma instantanea, mis ojos se cierran en ese instante, sus labios se mueven fuertemente, un beso apasionado aparece, dejando atras la dulzura y ternura.

La postura y el lugar no son los indicado para un acontesimiento como este, de un momento a otro un ruido proveniente de su brazo, -o eso creo- emana de la nada, sus labios comienzan a temblar y su respiración se agita.

Se separa de mi con lentitud, sus ojos estan totalmente abiertos y atentos a mi.

-¿pasa algo, Max?

-Si,si, yo... debo irme... regreso dentro de un momento.

-Pero Max...- camina rapidamente a la salida de la cafetería, dejandome con la frase incompleta.

MAX'S POV

Caminé apresuradamente fuera de la cafetería, mi reloj no dejaba de hacer su irritante ruidito, alguien me llamaba y estaba casi seguro de saber de quien se trataba.

Luego de asegurarme de estar completamente solo, opimí el botón para contestar la llamada.

-Hola, Max.

-Dark Mayhem.

-¿Qué tal van las cosas en Hiddenville? ¿has cumplido con tu parte del plan?

-Aún no, oscuro.

-¿y qué es lo que esperas? ¿quieres una invitacion?

-Hay una fiesta este fin de semana, actuaré esa noche.

-¿qué día?

-Domingo.

-Bien, esperaré tu reporte el domingo en la noche. No me falles, si aún deseas ser un súper villano haras lo que sea para dominar el mundo ¿no es así?

-Si, Dark Mayhem, no le fallaré, no esta vez, Aurel y yo nos encargaremos de que los cuatrillizos Harper ya no se inerpongan en mi camino a la cima.

-Me gusta escuchar eso.

La pantalla de mi reloj se torna negra, indicando que Dark Mayhem ha cortado la comunicacion.

Sé y estoy de acuerdo con que esa conversacion sono rara.

Desde hace unos seis meses he vuelto a tener contato con él, mi regreso a la villania fue inmediato. Le dije a Dawn que ahora era un heroe, pero no es verdad, de hecho mi obseción con ser el rey del mundo y dominarlo a mi antojo se ha incremenando mucho.

Dark Mayhem sabe eso y dijo que prdría serlo si siempre y cuando sacaba a Dawn y sus hermanos de mi camino, realmente no quiero hacerlo, no quiero lastimar a nadie pero quiero y debo ser feliz, esto es lo que siempre he querido, ser importante, famosos, amado y odiado por todos, el poder en mis manos, dar odenenes y mandar a mi antojo.

Solo hay dos cosas que oido de este plana: primero, tengo que lastimar a la chica que amo y, segundo, la persona con la que debo trabajar en este plan es nada mas y nada menos que Aurel Nowak, mi queridisimo amigo polaco.

Resulta que Aurel, es el hijo de un primo de Dark Mayhem, prácticamente como su primo segundo o algo así, Aurel tiene la misma ambision por dominar el mundo, así que tecnicamente estoy disputando con él por el puesto de rey.

DAWN'S POV

Max se había marchado hace unos diez minutos, la hora del almuerzo esta a otros diez minitos e terminar, y yo segia sola.

-Volví hermosa rubia.

-Tardaste un poco, Max.

-Si, debia arreglar unos... asuntos personales.

-¿Tan personales que no los puede saber tu novia?

-Algo así, hermosa.

-¿Debo preocuparme?

-No, claro que no.

-Bien.

Besa mi cabello y acaricia de arriba a abajo mis brazos desnudos por mi blusa sin manglas.

-Hmn, te amo, Dawn- habla con la boca pegada a mi cabello.

Sonrío.

-Yo te amo más,Max.

-No hermosa, yo te amo más- llevo mi cabeza hacia atras.

-No Thunderman, yo...

Besa mis labios suavemente.

Como amo estos momentos.

-Max ¿no tienes hambre? supongo que no has comido nada.

-Te comería a ti, pero tengo hambre de comida así que te salvas esta vez nena.

-Deja tus juegos raros y ve a buscar algo.

-Claro linda.

...

OMG!

Lamento haber estado tan inactivaa, tuve unos problemas respecto a la escritura de los capítulos.

Un mes es demasiado.

Cuatri-Aventuras De Amor | La VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora