Líos De Amor [2da Edición, Cuarto Aniversario]

Capítulo 22: Reencuentro ¿Reconciliación? y ¡El "wey" de las palomitas!

¡Vaya conferencia! Ya me tenía previsto qué tipo de preguntas harían pero, uno nunca está listo para afrontar en público los dramas del pasado. Cuando terminamos la conferencia, regresé al hotel que había recervado Lisa. Me sentía aturdida y mi mente no estaba presente en todo el viaje. Lisa hablaba de los próximos planes pero, no le ponía mucha atención. Hablar de John, de David y de mis amigos de la manera en la que lo hice daría pie a muchos problemas - claro, si se hacía presentes reclamándome - tenía un poco de miedo. Al llegar al hotel me percaté que era el mismo que presenció una pelea y dos peticiones de matrimonio. Me sentía en un Deja vu. De pronto sentí como si alguien me llamara. Busqué de dónde provenía aquel susurro molesto hasta que mi vista dio a la recepción. Mis ojos se abrieron como platos al ver que el hombre que me llamaba era... ¡El wey de las palomitas! Aquel recepcionista metiche e imprudente.

- Hola señorita Mason. Es bueno volverla a ver... Ha pasado ya un tiempo desde la última vez que la vi - sonrió recargado en el mostrador con un gesto un tanto soñador. Su barbilla descansaba sobre la palma de su mano.

Linda me miró extrañada. La tomé del hombro y le susurré al oído que era un viejo conocido, que podía adelantarse, que la alcanzaría después. Ella asintió y sin más se alejó.

- Hola. Veo que sigues trabajando aquí - respondí sonriendo - Y ¿tus palomitas?

- No ha pasado nada nuevo desde que se fueron, así que no las he necesitado. Desearía que pasara algo verdaderamente entretenido para matar el tiempo pero, mala suerte... - dijo riendo - por cierto, veo que no siguió mi consejo de quedarse con los dos galanes.

- No. Era mucha responsabilidad para mí - sonreí divertida por la ocurrencia.

- Hace unos meses vi por aquí al señor  Taylor con su nueva novia, la modelo Reneé Simon...

No sé porqué oír ese nombre me incomodaba de gran manera. Tal vez estaba celosa. Fruncí el ceño y me alejé molesta sin si quiera despedirme. No le di tiempo de seguir hablando. Caminé directo al elevador y para llegar s mi habitación y poder descansar.

★★★★

La boda terminó un tanto con emociones muy revueltas. Nadie podía negar que la aparición inesperada de Serena nos había descontrolado a todos pero, al final todo salió como las gemelas esperaban. Después de la fiesta, Andy, Roger y las gemelas abordaron un automóvil que los llevaría al aeropuerto para su luna de miel. A Leo no le había sentado nada bien volver a ver a Serena. Regresó de inmediato a Nueva York  con el pretexto de tener trabajo pendiente. En cuanto a Simon, Yasmin tenía una pasarela en París, así que ambos  se fueron de igual forma para poder llegar a tiempo para aquel compromiso.  Solo quedábamos Nick, Michael y yo en Londres. No hablamos absolutamente nada de lo que habíamos visto en la televisión. Decidimos dejarlo como estaba.

El asunto de la rueda de prensa provocó una pelea con Reneé. No pude esconder mi interés  - y mi felicidad - de volver a ver a Serena. Me sentía tan extraño.  La escena de celos no se hizo esperar.

- ¡Dime que pasó entre ustedes! - grito decidida de desenmarañar el asunto. Nunca le mencioné mi historia con Serena y el hecho de no haberlo hecho le molestaba aún más.

- No tengo por qué decirte que pasó, ese es solo asunto mío y de ella, de nadie más - respondí fríamente - yo nunca te mentí sobre nosotros y tú lo aceptaste sin  condiciones. Tenemos una relación abierta, nada formal y punto. Este papel de novia celosa no te queda.