Ellos no se han ido.

Capítulo 7: Pesadillas.

¿Recuerdas esos días en los que solías ser un niño pequeño, que despertaba en las madrugadas agitado y sudando, por que habías tenido una pesadilla? Tal vez no lo recuerdes, pero seguramente tus padres si, o incluso tus hermanos. Las pesadillas, esos sueños llenos de terror, angustia e incluso muerte. Todos alguna vez tuvimos una pesadilla y quisimos no volver a tener una.
Descendemos a la oscuridad de nuestra mente, aquella que juega con nosotros mientras dormimos. El cerebro es sabio y sabe mejor que nadie cuales son nuestros temores, ya que al cerebro no se le puede engañar.
Pero, con mis investigaciones, he descubierto algo muy impactante... ¿Que pasaría si aquellos sueños agitados, en realidad son mas que una ilusión creada por nuestra mente? ¿Que pasaría si en realidad las pesadillas son ventanas a mundos donde nunca quisiéramos estar una vez mas? De niños nos alegraba saber que todo era mentira, que solo estábamos dormidos cuando en nuestra pesadilla aquel fantasma nos seguía.
Pues lamento informar a quien sea que lea esto, que las pesadillas son reales, tanto que pueden llegar a nuestro mundo. Cuando el miedo es tanto y la desesperación llega a limites tan altos, provocan que aquella ventana a los mundos tenebrosos se abra, dejando entrar a aquellos seres que se lamentan.
Este es el caso de Donovan Smith, un niño nacido en el año 1923 de tan solo siete años. Todas las noches cuando eran las 2:00 am, tenía la misma pesadilla. Soñaba que cosas horribles le observaban mientras dormía, además de tener una horrible sensación de viento en su rostro, como si estuviera volando y no pudiera respirar.
A veces, mientras dormía, gritaba desesperado "Ayudenme, esas cosas... Esa cosa me mira y me esta llevando, dicen que en su mundo seré feliz, sin adultos... Pero tengo miedo, tiene la boca roja y no deja de mostrar los dientes"
Esto preocupó a sus padres, pero pensaron que el pequeño niño solo estaba dormido, que no le iba a pasar nada, que esto era provocado por las historias de terror que le contaban sus hermanos mayores sobre duendes y brujas.
Una noche los padres escucharon un estruendo durante la madrugada, un gran golpe contra la madera que hizo un sonido fuerte por toda la casa.
Ambos fueron corriendo hasta la habitación de su hijo, solo para ver una escena curiosa. La cama del niño estaba pegada a la ventana, como si alguien hubiera querido sacarla por ahí. Los cristales de la ventana estaban rotos, pero lo mas importante era que el niño no se encontraba por ahí.
Al acercarse a la ventana pudieron ver hacía la oscura noche reflejada por la luna.
Dos seres que volaban y tenían cola, se llevaban al niño tomándole de los brazos mientras reían. Parecía que el niño estaba dormido y no sentía nada, ni que era llevado por los aires de la oscuridad.
Los padres sin saber que hacer, se quedaron morados del susto.
A la mañana siguiente, sus padres habían salido a informar al pueblo sobre lo sucedido pero al volver a casa se encontraron con el pequeño que aun dormía en su cama. Los padres bastante confundidos y aliviados fueron hasta el a despertarle.
"Tuve la misma pesadilla papá. Unos monstruos me veían y reían... Me hacían sentir que volaba y que no podía respirar. Ellos me llevaban a una cueva oscura donde había mas como ellos, pero ellos al verme se enojaron y dijeron que aun no estaba listo... Que cuando cumpla un año mas lo estaré y pidieron que me regresen a casa... ¿Que significa eso?"
Preguntaba el pequeño mientras lloriqueaba. Lo peor de esto era que faltaba apenas una semana para el cumpleaños de Donovan.
Sus padres apenas y comían solo para cuidar de su hijo, sin apartarse un segundo de el. Pero lamentablemente, la noche de su cumpleaños, el chico simplemente desapareció sin rastro alguno.
Sus padres, antes de que su hijo fuera raptado según las autoridades, tomaron una fotografía el día de su cumpleaños. El pequeño estaba en su habitación, sobre la cama, con una gran sonrisa mientras tenía en sus manos un barco de madera, un regalo que su padre le dio. Lo curioso en la fotografía es que por debajo de la cama, se ven ojos brillantes y la punta de una cola.
Cuando los padres revisaron debajo de la cama, una semana después de la desaparición de su hijo, vieron que en la madera estaba escrito algo.
"Nosotros nunca nos íbamos. Estábamos aquí, debajo de el, cuidando que engordara lo suficiente para el festín"

... Todo esto que acababa de leer, era sobre otro caso que se encontraba en el libro que la anciana nos entrego. En la pagina se encontraba una fotografía muy vieja, donde se ve el niño y aquellas cosas por debajo de la cama, como si vieran directo a la cámara.
Había una parte pequeña con el siguiente fragmento.

Lamentablemente, este no fue el único caso de secuestro de niños en el pueblo. En 1940, los padres de una niña llamada Isabel, dieron a conocer a las autoridades que su hija de 5 años desapareció. Los padres reportaron que la niña solía jugar sola por las madrugadas, y que una noche al espiarla, se dieron cuenta que la pequeña le hablaba a algo que se encontraba por debajo de la cama. Nunca vimos nada, pero parecía de verdad algo malo, ya que a veces mi hijo se quedaba callada y decía cosas como "No, no quiero que mas niños vayan allá, ellos no están listos, son muy pequeños..." Esto provoco sospechas en todos de que se trataba de algún pedófilo que se ocultaba en las habitaciones de los niños y que convencía a los niños a conseguir mas amiguitos. Pero lo raro fue lo siguiente... En una cueva en la profundidad del bosque, se encontraron varios esqueletos pequeños y un cuerpo en putrefacción de un niño que al parecer había sido mordido incontables veces, además de que su sangre había sido extraída por completo, quedando como una pasa. Obviamente las personas sospechaban que se trato de algún oso o otro animal que pudo haberse comido a los niños, y que ahí, era donde el pedófilo los llevaba para violarlos y luego matarlos. El caso quedo inconcluso, pero seamos inteligentes, sabemos que esto no es obra de un animal.