Matar al Rey

I'm Watching You

Se tensó al sentir aquella mano extraña posarse en su hombro y sin pensarlo tomó al sujeto de la mano y lo hizo elevarse por encima de su cabeza y lo tiró al piso, fue entonces cuando se dio cuenta de quién era el sujeto que lo había "atacado", el incidente llamó la atención de las personas en el parque.

- ¡mierda Otabek! – gritó el rubio al ver a su presunto atacante, Otabek sin embargo lo miraba impresionado, sabía que el hecho de que su piel fuera invulnerable lo había hecho extremadamente pesado y que alguien tan pequeño como Yuri pudiera levantarle se le hacía muy extraño, a menos que... Yuri fuera un dotado. –¿Qué mierda está pasando por tu cabeza? ¡pude haberte lastimado! – le grita Yuri, mientras le levanta fácilmente con una mano –mierda – masculla en voz baja mientras busca a lo lejos a alguien.

-lo siento Yuri – se disculpó – sé que he sido un imbécil – dijo mientras observaba al rubio buscar a alguien a lo lejos, el menor volvió su rostro a el – ¿estás bien? – Yuri le miró furioso antes de soltarle un gran grito.

- ¡no Otabek nada está bien! – le grita exasperado – ¡estuve 30 minutos congelándome el culo en esta banca para poder atrapar a un tipo y llegas a joderlo todo después de que me llamaste puta! – Otabek dejó que el rubio se desahogara, después de todo se lo merecía por imbécil –¡deja de mirarme así y di algo carajo! – Yuri no se esperó la acción del azabache, solamente sintió los labios del contrario sobre los suyos y segundos después su lengua intentando abrirse paso en su boca, después de un momento el calor del mayor, mezclado con el delicioso aroma de madera, menta y cigarrillos hizo que Yuri bajara sus defensas y diera entrada al azabache, Otabek era tan maravilloso que podía calentarle ahí en medio de un parque, rodeado de un montón de personas. Se separaron una vez que el oxígeno les hizo falta y ambos se miraron a los ojos. Otabek supo que era el momento de hablar.

-Yuri... yo – dijo mientras colocaba un mechón de cabellos tras de su oreja – soy un imbécil – el rubio le miró incrédulo antes de soltar una carcajada desconcertando al mayor.

-al menos tienes el valor para decírmelo – respondió mordaz

-espera –le calló – sé que la cague y me disculpo – Yuri lo miró intentando hacerse el duro – pero ver a ese chico me tomó por sorpresa – Otabek miró al rubio quien lo miraba desconcertado, se sintió un imbécil y con frustración se llevó una mano al rostro – mira sé que sueno como un idiota posesivo, pero en ese momento no supe cómo reaccionar y probablemente no lo arregle, pero... lo siento... en verdad – el menor lanzó un suspiro al escuchar eso

-Tienes razón no ayuda mucho – respondió y pudo notar la cara de decepción del mayor – pero puede que una bebida caliente y una dona probablemente ayude – luego sonrió al notar el desconcierto en la cara del mayor, se dio media vuelta y comenzó a caminar, al no oír a Otabek seguirle Yuri se giró nuevamente.

- ¡muévete Altin! ¡se me está volviendo a congelar el culo! – el grito lo sacó de su burbuja y sonrió para si antes de darle alcance al rubio.