EL REGRESO DE JIMIN [Jimin Y Chanyeol]》PAUSADA《

24

-Oye, ¿porque lloras?

Su voz era grave y sonaba preocupada, Jimin intento recuperarse pero le fue más difícil al sentir los brazos del desconocido rodearlo, poniéndolo más sensible.

Era cómodo estar de aquella manera, pero Jimin se vio obligado a separarse mirándo fijamente al individuo frente a él.

-Gr-gracias, pero ¿qu-quien eres?- pregunto tímidamente mientras sorbía su nariz, se le hacía familiar, pero también penoso que alguien lo viera en ese estado.

-Soy Kim Jong in- le dedicó una sonrisa la cual le pareció encantadora -y tu eres Jimin ¿no?- el nombrado salió de su nube para prestar atención a sus palabras.

-Si ¿como lo sabes?

-Soy amigo de Chanyeol- le dedico una sonrisa que hacía que el corazón de jimin se acelerará, aun así ese nombre lo entristecía.

¿Que le está pasando?

El chico era lindo, demasiado, es amable también, pero algo más debe de tener para hacer sentir de esta manera a Park.

-¿Que haces aquí?- Fue la pregunta la que le devolvió a la triste realidad-Fue chanyeol- esta vez su voz sonó más grave, se notaba que esta enojado y cansado. Él solo asintió tímidamente, ¿acaso o se daba cuenta de lo tierno que podía llegar a ser? -Vamos- dicho esto agarro la mano de Jimin levantándolo, este lo miro extrañado -Te alegraré el día- le volvió a sonreír haciendo que el otro desviará su vista, fijandola ahora en el suelo.

Se dirigieron casi corriendo a la salida de el establecimiento.

-¿A donde vamos?

No le respondió, sino que continuo con su recorrido a quien sabe donde, aun así Jimin no ponía resistencia.

No fueron ni cinco minutos los que pasaron que ya habían llegado a una ¿academia de danza? Si, o por lo menos eso parecía, al entrar al lugar pudo ver un montón de chicos y chicas calentando o practicando coreografías, Jimin sólo miraba a su alrededor, era bastante espacioso el lugar, con un espejo en toda la pared y un montón de mochilas tiradas en una esquina, aparte de los chicos bailando era lo que le confirmaba sus sospechas.

-Ven- llamó Jongin a Jimin, guiandolo a uno de los grupos de bailarines, que para el eran los que mejor bailaban, se pusieron delante de ellos llamando su atención inmediatamente -El es Jimin chicos- presentó

-Ho-hola- los bailarines quedaron encantados con lo tierno que era.

-Ellos son Taemin, Momo, Lisa, Lay y Mark- dijo Jongin mientras señala con el dedo a los que iba nombrando, estos le dedicaban una sonrisa.

-Un gusto conocerlos- fue dicho en casi un susurro que apenas se escuchó.

-El gusto es nuestro- respondo una rubia alta que al parecer se llamaba Lisa

Después de eso fácilmente Jimin fue integrado al grupo, a pesar de que el baile no era una cualidad suya podía aprender, Jongin se ofreció a hacerlo algún día, si el estaba de acuerdo lo cual Jimin acepto inmediatamente.

Estaba presenciando la grandiosa coreografía que habían echo, y es que estaban tan sincronizados que no había error alguno en esta, tienen que participar en una competencia de baile dentro de una semana, Jimin estaba seguro que ganarían.

Todos eran buenos, pero en su opinión, el que mas resaltaba era Jongin, sus movimientos, su agilidad y coordinación lo hacían inigualable, tal vez estaba exagerando aún así no paraba de alabarlo.

-¿Te gusta?- asintió rápidamente, el contrario se río bajo.

-Perdon, pero se esta haciendo tarde y me tengo que ir-

-yo te llevo- dijo mientras recogía sus cosas, iba a protestar pero al ver que no había nadie más que ellos callo.

Iban caminado a paso lento y en silencio, sin palabra alguna, era un silencio cómodo para ambos, hasta que uno de ellos decidió hablar.

-¿Aquí es?- señaló la residencia en la que se habían detenido.

-Si.

-Lindo lugar.

-Gracias- dicho esto se acercó timado menta a su mejilla para poder besarle, este tenía los ojos como platos y las mejillas coloradas, Jimin simplemente era un tomate -Adiós- se fue corriendo adentro de su hogar, viéndolo después por la ventana, este seguía ahí para solo que ahora con una sonrisa y su mano posada en su mejilla, al parecer no se había se percatado que lo miraban, Jimin sonrió de igual manera para después cerrar la cortina antes de que el otro se diera cuenta.

-Hola hijo- saludo su madre saliendo de la cocina, Jimin se sobresalto.

-Mama me asustanste- la nombrada se río.

-¿como fue tu día?

-Fue de lo mejor- contestó con los ojos cerrados y una sonrisa en su rostro, vagando en sus recuerdos se ese día - La mayoría- recordar su charla con Chanyeol no lo ponía de buenas, sino todo lo contrario.

-¿Quieres hablar de eso?

-Quiero dormir- respondió sonriente acercándose a su madre para así depositar un beso en su mejilla, recordó lo de hace unos minutos riéndose en lo bajo.

Se fue a descansar agradecido por haber conocido a aquel chico moreno que alegro su día, quería verlo más seguido, tal vez así son reiría más seguido.

Espero que les haya gustado, hasta la próxima.