ยิ้ม || Smile ||

A Few Years Later. ~ Alternate Ending ~

" En algunos años, después de hoy

Luego de que todo este tiempo haya pasado..."

La nieve cubría Seoul como una sabana blanca, aquel mismo blanco que le resultaba enfermizo.

Se abrió paso por aquel manto de cinco centímetros de espesor, dejando huellas tras de si, siguiendo las que su husky había dejado impresas entre saltos, feliz de estar afuera, ignorante de el deprimente destino que tenían. 

"Cuando cada uno de nosotros se haya vuelto una sola persona y este viviendo bien... "

Sus pasos se detuvieron al ver a su mascota sentada en la nieve frente a el lugar correspondiente, si bien no visitaba el lugar desde hace casi un año ambos recordaban el camino de memoria después de tantas visitas a aquel monolito gris con inscripciones en tres idiomas, inglés,  coreano y tailandés, cubiertas parcialmente por un manto blanco. 

Sacudió esta con delicadeza, acariciando con la punta de sus dedos la inscripción que leía; 

"Phichit Chulanont, patinador artístico, amado hijo, novio y amigo. 1996-2018"

Dió un suspiro largo. Habían pasado cinco años desde aquella tarde en la que lo había perdido y estaba seguro de que no volvería a llorar como ese día. 

- Perdón por no haber venido en tanto tiempo. - le habló a la tumba, escondiendo las manos en los bolsillos de su abrigo color verde olivo. - Yo...  he estado algo ocupado, con las competencias y eso...- respiró profundo. - Ya te lo había dicho...conocí a alguien hace unos años, antes de entrar al servicio militar...es fotógrafo, lo conocí en una competencia...creí que eso sería todo, pero, hace un año volvimos a encontrarnos... es un buen chico...tiene una hermosa sonrisa... no tanto como la tuya, claro.

Cerró los ojos, esperando una respuesta que no llegaría nunca. 

- Le pedí que se casara conmigo. - finalizó. 

La brisa helada choco contra sus pálidas mejillas. 

- Se que me dijiste que fuera feliz...se que eso es lo que querías, pero... pero no puedo dejar de amarte, Phichit. - un leve escocer en los ojos seguido con mirada nublada le indicó la presencia de lagrimas que no tardaron en crear surcos en su rostro, a su mente regresó el mensaje escrito con letra floreteada en una pequeña hoja de papel de rayas y que aún guardaba en la mesa de noche a lado de su cama. 

"Seungilie;

Te mentiría si te digo que no tengo miedo. Estoy aterrado, pero al mismo tiempo estoy feliz, sabiendo que si no sobrevivo, no me iré solo y triste como estaba hace unos meses. 

Gracias. Gracias por amarme como lo haces, gracias por ayudarme a olvidar, a enseñarme como es sentirse bien en los brazos de una persona. Gracias por devolverme la sonrisa que perdí hace tantos años. 

Y así como yo pude ser feliz a tu lado, quiero que tu vivas una vida larga, quiero que encuentres a alguien que te haga feliz, alguien que ponga una sonrisa en tu rostro. No quiero que te quedes estancado en mi recuerdo. 

Gracias. Te amo. 

Siempre tuyo.