Nunca pensé que el hecho de que Lucy cumpliera años el pleno 25 de Diciembre me dificultaría en algo las cosas.
Miré en las vitrinas —otra vez—, pero no encontré nada que fuera lo suficientemente "Lucy"
<<Excéntrico, moderno, original y llamativo>>. Aquellas palabras eran las que describían a la perfección a la pequeña castaña. No podía pensar en algo que colgara de su muñeca y que al mismo tiempo tuviera esas características. Al menos no como Lucy había solucionado mi cadena cuando me fui de Nove y me la regaló en esa última fiesta en la playa.Ella misma me había dicho que para escoger mi regalo, se había planteado cinco palabras: <<Discreto, Noble, Brillante, Inteligente y Bello>>. Según ella, esas eran las cinco palabras que me describían a mí y, como primer regalo que me daría en la vida, quería que fuera algo que me describiera en aquel verano. Yo no concordaba con la 3 de las 5 palabras —quizás en el fondo no concordaba con ninguna—, pero Lucy me había insistido tanto en que eran verdad que ya hasta empezaba a pensar que tal vez tenía razón.
El punto era que, yo también quería hacer de aquel primer regalo especial. Elegí esas palabras, y ahora estaba en busca de algo que lo describiera... pero no encontraba nada. Iba a morir en el intento.
— ¡Éste está muy bonito, Caro! — Exclamó Ronny jalándome de la manga de mi blusa blanca de cuello de tortuga, e invitándome a ver un broche de oro con el centro de esmeralda.Muy bonito... pero no era Lucy.
— No es suficiente. — Declaré antes de revolotear los ojos por el resto de broches en aquella pequeña vitrina que estaba justo en el centro de la joyería donde Ronny me había sugerido buscar. Aunque no la vi, supe que mi hermana había puesto sus ojos en blanco.
Me importó poco.
— Bueno pues, ¿Cómo que buscas?
— Ya te lo dije, algo excéntrico, moderno, origi...
— Si si si, tu ridiculez de las cinco palabras ya me la sé. — Me enderecé tras estar jorobada viendo los broches, le regalé una mirada asesina, y rodeé la vitrina caminando hacia el área de los anillos. — Pero, ¿qué? ¿Un broche? ¿Collar? ¿Aretes? ¿Brazalete?
— Ella junto con Omar me regalaron un brazalete; sé que tiene que ser algo así.
— No necesariamente.— Comentó deliberadamente Ronny, haciéndose la desentendida mientras que sus ojos se agradaban al ver los relojes. — ¿Un reloj? Tal vez así llegue a tiempo un solo día a clases. — Solté una pequeña risita entre dientes sin voltear a mirarla.
Continuamos en silencio recorriendo todas las vitrinas de aquella gran joyería en el centro de Boston. De vez en cuando ella comentaba cosas como "¿Este no te gusta?" "¿Qué te parece este?" o "Recuérdame, ¿Por qué accedí a acompañarte en esto?", y yo contestaba con pequeños monosílabos como "No", "No sé", "No me molestes". Bueno, lo último no era un monosílabo, pero generalizando.
Llegamos hasta la estantería principal, donde había grandes y brillantes anillos de boda. Aunque eran bonitos y algunos podían contener las 4 palabras, por mucho que a Lucy no le importara, no podía regalarle una sortija.
Estaba entre la espada y la pared.
— No hay nada, quizás debamos... — Comenzó Ronny, extendiendo su mirada hacia la gran entrada sin puerta que estaba a unos 30 metros en ese gran departamento de joyería. Dejé caer mis hombros vencida, y volteé hacia las vitrinas una vez más. — Vamos, conozco otra joyería. Es pequeña, pero tienen cosas lindas.
<<Lindas>>. No dijo <<Preciosas>> <<Exuberantes>> o <<De ensueño>> como lo había hecho cuando mencionó la gran joyería en la que no habíamos encontrado nada. ¿Qué esperanza teníamos si en una gran-joyería-donde-todo-mundo-encuentra-todo no habíamos encontrado nada? ¿Enserio lo haríamos en una joyería pequeña?
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Una Escritora Sin Amor ~Aguslina~ «Adaptada»
FanfictionCarolina busca entrar a la universidad con una beca estudiantil, pero para eso tiene que escribir una historia de un tema en el que es totalmente inexperta... EL AMOR... #175 en romance. #80 en fanfic. #Terminada. Gracias por todo, gracias por tanto...