El volleyball es mi vida. (Haikyuu y tú)

VII: Cuando la luna brilla.

—Pasamos toda la noche durmiendo abrazados en la enfermería, ni idea como terminé en su pecho, pero el sonido de su corazón me daba tranquilidad.

En la mañana despertó primero que yo y se fue, quien sabe donde, solo me di cuenta cuando alrededor de las diez y media estaba acostada sin él a mi lado, por lo que me senté en la orilla de la cama y luego me levanté, para así ir a la habitación donde los demás, al llegar pude ver en el espejo lo desaliñada que estaba, así que entré a la ducha, donde me relaje, para luego vestirme e ir al gimnasio, para mi sorpresa solo estaba Kuroo, Akaashi y Bokuto.—

Kuroo: (T/n-chan) ¿Te nos unes?

(T/n): Me gustaría, claro.

Bokuto: ¡Geniaaaal! Ahora podré vencerte Gato.

Akaashi: Bokuto-san, siempre lo a vencido.

(T/n): Pero ahora estoy yo.

Bokuto: ¡Aaaaa! Pero si eres muy pequeña.

(T/n): Eso no significa que no pueda saltar.

Kuroo: Haz dicho lo mismo que el enano de Karasuno.

(T/n): ¿Hinata?

Kuroo: Exacto.

—Comenzamos el pequeño juego donde a propósito deje pasar el pase a Bokuto para determinar como detenerlo, Kuroo sonrió algo sarcástico y ya al segundo lanzamiento, mi bloqueo fue perfecto, evitando que Bokuto anotara y así fue hasta cuando ya estábamos muy candados para seguir.—

Bokuto: ¡Una más!

(T/n): Bokuto-kun. . . debemos ir a almorzar, si quiere, luego.

Bokuto: Me la debes, (T/n-chan)

(T/n): Akaashi, ¿Siempre es así?

Akaashi: Si, sobre todo con Kuroo.

(T/n): Ellos me agradan.

Akaashi: Ya veo.

(T/n): Tu igual, por si en tu mente pensabas que no.

Akaashi: Gracias, (T/n-chan)

(T/n): Quisiera hablar con ustedes a la noche, con los tres, Tú, Kenma y Tsukishima.

Akaashi: ¿Ocurre algo?

(T/n): Algo muy grave.

Akaashi: No me asuste.

(T/n): Buhito asustadizo.

Akaashi: Les avisaré.

—Fuimos a comer, aunque con Akaashi no comimos demasiado, pues luego de que Kuroo y Bokuto terminaran su ración, nos miraron como si hubiesen quedado con hambre, así que les dimos lo que quedaba de nuestra ración.
Al terminar volvimos al gimnasio, pero cambiaron las posiciones y Bokuto quiso bloquearme, pero no lo logró y Kuroo tampoco pudo, fue divertido ver a Bokuto en su modo emo, pero Akaashi ayudó a que eso se le acabara.
Era la hora de cenar y luego ir a las habitaciones, donde al llegar junto a Akaashi, esperaron a los demás —.

(T/n): Por cierto, ¿Que ocurrió con el ratón?

Akaashi: En la mañana ya no estaba y la caja estaba roída.

(T/n): Lo pensé. . .

Akaashi: ¿Y qué es eso tan importante que quiere hablar con nosotros?

(T/n): Ya verán.

—Akaashi, miró su móvil y yo comencé a jugar en mi 3ds, hasta que me quedé dormida por media hora, pero luego Kenma me despertó—.

(T/n): ¿Qué pasa?