Capítulo 12

1.6K 163 23
                                    

-Supongo que me será suficiente esto -guardé 40.000₩ que me había dado mi madre para la comida en una pequeña cartera que tenía en el interior de mi mochila. 

-¿Qué miras, ______? -Haechan se acercó a mí con un montón de dinero en la mano para la comida.

-¡Oh! No, nada -aparté mi mochila de la mesa. 

Él comenzó a mirarme de hito en hito al ver que no tenía nada de dinero en mis manos.

-¿No vas a comer? -me preguntó. Asentí con la cabeza-, ¿Con qué te la vas a pagar entonces?

-Yeri me dará de la suya porque está con que no quiere comer nada, cogeré de Renjun y tú me darás porque te pasas el día alimentándome -sonreí y él comenzó a reírse a pesar de que o tuviese toda la razón. 

Ambos comenzamos a caminar juntos a la cafetería del instituto. Nos costó un poco llegar hasta este sitio, ya que estaban todos los alumnos más pequeños corriendo y chillando por los pasillos como animales furiosos. 

Lo que hacía el hambre.

Finalmente llegamos, y estuve esperando toda la cola junto a Haechan hasta que él pudo coger un bandeja y ponerse la comida tras haberla pagado. 

Yeri y Renjun nos saludaron a lo lejos, por lo que nos sentamos junto a ellos, así ocupando una mesa entera. Poco tardó mi amiga en ponerme un plato delante de arroz con salsa de soja y verduras que ella no se iba a comer.

-Hoy no tengo hambre -se quejó ella mientras repartía su comida entre nosotros tres.

Miré a Haechan. "Te lo dije" pensé y ambos comenzamos a reírnos. Renjun, un tanto molesto, le devolvió la comida a su propietaria.

-Tienes que comer, Yeri -ella bufó, por lo que Renjun fue obligado a encontrar otra manera de hacer que ella comiese-. Si no te terminas el plato de comida, te doy el mío también y comer el doble.

Poco tardó ella entonces en llevarse los palillos a la boca cargados con una gran bola de arroz. 

-Yeri, deja de decir eso de que no tienes hambre solo por no comer -Haechan la miró seriamente-. Tienes que crecer todavía, y no quiero que te pase nada, ¿de acuerdo?

Ella asintió lentamente. A todos nos empezaba a preocupar su situación, ya que estaba realmente delgada -incluso me atrevería a decir demasiado- y quería seguir reduciendo su peso.

-¿Qué hicisteis ayer por la tarde? -preguntó Renjun tratando de cambiar de tema.

-Estuvimos estudiando ______ y yo -explicó mi mejor amigo.

-Estudiando -repitió Yeri arqueando una ceja, ya que era realmente difícil de creer aquello que había dicho.

-Estuvimos con los libros, pero no estudiando -le corregí-. Y al final yo me quedé a cenar en su casa porque se había hecho muy tarde.

-Oye, pero: ¿por qué tardaste tanto en venir a mi casa? -inquirió él mientras masticaba un trozo de carne.

-Por una cosa que pasó -asentí tratando de no mirarle a los ojos.

-¿El qué? -esta vez fue Renjun.

Bufé. Si les decía "una cosa", ¿no era muy obvio que no se lo quería decir? 

-Conozco a una persona que está en el hospital... Le fui a visitar; es eso, no es tan interesante -terminé por decir para que no preguntasen más, aunque eso generó incluso más dudas.

-¿En serio? -Yeri saltó impresionada comiéndose los últimos granos de arroz de su plato mientras Renjun le miraba con una expresión victoriosa-, ¿quién?

-Si quieres podemos ir contigo la próxima vez -se ofreció Haechan, a lo que yo negué con la cabeza.

-No hace falta que vengáis, prefiero ir yo sola. Además, no le conocéis y os aburriríais muchísimo.

-¿Cuándo volverás al hospital para verle, ______? -Haechan estaba serio. 

-Esta misma tarde voy a verle -mi respuesta no pareció agradarle mucho a mi mejor amigo. 

-Dile que se mejore de mi parte -Yeri me agarró la mano mientras asentí con la cabeza sintiendo lástima. Renjun también movía la cabeza por detrás haciéndome entender que de su parte también.

-¿Y por qué está ahí? -intervino Haechan.

-Una reacción alérgica muy fuerte. Tiene que estar ahí dos semanas enteras ingresado como mínimo -una mueca triste se dibujó en mi rostro subconscientemente al recordar su situación, además del hecho de que se pasaba los días solo... al menos tenía mi teléfono.

-¿Y vas a estar visitándole todos los días por las tardes? -me preguntó mi amigo de nuevo.

Me gustaría, pero no sería posible ya que perdía mucho tiempo y tenía que estudiar para el instituto. Afortunadamente era viernes, por lo que tal vez podría estar más tiempo con él para que no estuviese solo.

-Todos no, pero los que pueda sí que iré. Sus padres no pueden estar con él por temas de trabajo, por lo que está solo -expliqué.

-¿Y no tiene amigos que le hagan compañía en lugar de que tú vayas todos los días?  -Haechan en este momento parecía realmente enfadado.

-Supongo que sí, pero a mí no me ha dicho nada... Solo eso de sus padres y ya -justifiqué.

-Ya, claro... -bufó mi mejor amigo mientras se llevaba otro trozo de carne a la boca.

No sabía qué le ocurría a él en ese momento. No había dicho nada que le pudiese ofender o molestar a él... o al menos eso pensaba yo, pero por lo que veía, estaba equivocada. Yo no fui la única en percatarse de eso, ya que mis otros dos amigos restantes también se dieron cuenta.

-Haechan, quien no te conociese diría que estás celoso -rió Yeri antes de que él le fulminase con la mirada.



Chewing Gum [Jeno & Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora