~ Narra Luna~
Ya habían pasado dos días, Matteo y yo habíamos encontrado el escondite de Ben, y había algo sorprendente, nos dirigimos hacia una obra de la ciudad abandonada e incompleta, pero no encontramos nada.Matteo estaba frustrado y el perro le ladraba muy molesto, no había señal alguna de gente o de algo que estuviéramos buscando. Nos detuvimos en una gasolinera para cargar el tanque visualice una tienda y decidí entrar para buscar algo de comida.
- Ten cuidado.- me ordenó Matteo
Me puse sus lentes oscuros y su gorra, no quería que me reconocieran, entré a la tienda y tomé todo lo que pude ver que nos serviría, el perro me esperó afuera y me veía desde ahí. El cajero me miró de una forma rara pero no dijo nada, cuando pagué tomé las bolsas, suspiré aliviada y el perro caminó a lado mío.
No podía ver a Matteo desde ahí así que me acerqué al auto y lo v detrás de la gasolinera tratando de que no lo vieran, Matteo me miró y me señaló que entrara al auto, seguí su orden, actué normal mientras me subía al carro.
Entonces vi lo mismo que había atrapado la atención de Matteo, habían policías del otro lado comprando donas, típico.
Matteo se apresuró cuando terminó de llenar el tanque.
- Nuestra salvación esta en el perro, si no nos ven, le daré un banquete.- dijo Matteo.
Los policias miraban al rededor sin bajar la guardia. Eso fue... ¿extraño?
- Probablemente sepan que estoy vivo.- exclamó, suspiró y encendió el auto, el perro se escondió atrás sintiendo la tensión.
- ¿Qué haremos?- le pregunté, Matteo me miró y después miró hacia la carretera.
- Actuaremos.
Nos dirigimos cerca de los policías y ellos miraron nuestro auto, mi corazón latía cada vez mas rápido y me miraron, sentía como si nos fueran a descubrir. Finalmente miraron a lo lejos de nuevo y nos dirigimos a la carretera sin ser descubiertos.
Usaríamos aquella casa abandonada como base ahora, podía ver a Matteo de reojo, su rostro se veía tranquilo, llegamos a la casa.
Ahora estábamos en una sala con un sofá viejo, Matteo revisaba cosas desde una laptop, había robado una laptop de un colegio hace días. Aún si Matteo estuviera aquí conmigo, su mente no lo estaba. Yo estaba terminando de alimentar al perro.
- Nos vamos a San Francisco.- dijo de repente, levanté la mirada, no había hablado desde hace una hora.
- ¿Encontraste algo?.- pregunté, me levanté y caminé hacia su lado.
- No, no hay internet aún así que, supongo que estamos bien.- dijo el. Matteo tomó su rostro con sus manos y suspiró.
- Tienes que descansar jovencito.- le dije en un susurro. Levantó su mirada lentamente y negó su cabeza.
- ¿Por favor?- insistí.
Matteo no me miró, así que estiré sus piernas en el sofá.
- Agh Luna, ¡no puedo hacerlo!- exclamó, movió de nuevo sus piernas y soltó un suspiro. Comenzó de nuevo a revisar la computadora mientras movía sus hombros haciendo una mueca.
- Masaje ahora mismo.- dije.
Caminé hacia él mientras me acomodaba detrás, comencé a masajear sus hombros y su columna, pude escuchar algunos gemidos de alivio.
- ¿Te sientes mejor?- le pregunté.
- Mucho mejor.- me contestó.
Relajó sus músculos mientras yo seguía masajeandolo, se sentía tenso de su espalda.
- Aquí.- me indicó.
Se quitó su camisa, lo que me hacía el trabajo más fácil, le dí masaje por casi una hora hasta que me detuve, mis manos me dolían y me acosté a descansar en el sofá. Matteo movió su laptop y volteó su rostro hacia mí, tomó mis manos y las besó.
- Sentí como si un ángel hubiera caído del cielo, y me revivió.- exclamó. Me miró a los ojos y movió su rostro cerca al mío.
- ¿Tu ángel?
- Sí, MI ángel.
Tomó mi rostro y me besó mientras me acercaba más a él, aún tenía mis piernas abiertas alrededor de él y eso a Matteo no le importaba, movió su boca y besó mi cuello.
- Descansaremos hoy, después nos iremos a San Francisco.- dijo de repente. Lo miré.
- Tienes que descansar Matteo, y trata de despejar tu mente un poco.- le indiqué, él sonrió débilmente.
- Eres la única persona que se preocupa por mí ¿sabes?.- me dijo, acaricié su cabello mientras me levantaba. - Oh, te traje más ropa.- me señaló la bolsa, me sorprendí un poco.- tu sabes, cuando nos detuvimos en ese centro comercial.- dijo y asentí con mi cabeza.
- Necesito una ducha.-
- No hay agua aquí... espera.-
Se levantó mientras salía hacia la puerta trasera, lo seguí. Matteo sonrió mientras mirábamos un río.
- Agua limpia, tenemos suerte.- exclamó Matteo.
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¿Cual es su color favorito? respondan aquí--------->
¿Adivinen quien paso el examen y quedo el la prepa?
Pues yo compitas, estoy muy happy💃💙💙
Otra cositaaaa
Hoy se sube el primer capítulo de "El nerd de mi vecino"
Para que vayan a leerlo en un ratito masss
-1💔
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My Dark Angel [Adaptada]
FanfictionSolo necesitas leer! Esta novela no es mía solo la adapte Portada hecha por @-Dxherty-