18

39.3K 2.1K 84
                                    

—Tengo que salir —le grité a mi hermano, quien por fin regresaba a casa, con una sonrisa en el rostro, al igual que yo —Iré con Harry.

—¿En serio te importa ese chico, no Kage?— traté de no sonrojarme ante las acusaciones de mi hermano mayor, pero me fue imposible—-Sólo no quiero que me salgas con tu...

—¡No mi Dios! ¡Ya me voy, no tendré ésta conversación contigo! —me apresuré a cerrar la puerta del apartamento, no sin antes escuchar una risa de burla por parte de mi hermano, mi dulce hermano.

Salí del edificio y empecé a caminar, al fin y al cabo, la casa del chico no estaba lejos, no para mí. Estos días me he sentido mejor que nunca, tal vez quizás de lo que me he sentido en toda mi puta vida, sí, eso creo. Mi gorrito de lana sostenía con fuerza mi pelo rubio, para que no despeinara, aparte que había bastante frío, el clima de Londres es bastante bipolar. El suéter de lana gris, sí, el mismo que me regaló Harry días atrás, lo estaba usando éste mismo momento mis pantalones negros ajustados se adaptaban a mis piernas, y sin contar de mis botas que mantenían calientitos mis pies. Bueno, ya, está bien, dejaré de hablar de lo que llevo puesto. Una pregunta rondaba por mi cabeza, ¿Por qué creía el mundo que necesitaba un novio? No necesitaba un novio. Había tenido suficiente para el resto de mi vida, para lo único que servía un novio era para romperte el corazón, pero, aunque no lo quisiera aceptar, mi corazón ya estaba roto. Cuando me di cuenta, ya había llegado a la casa de Harry, toqué su puerta repetidas veces, la puerta se abrió, estaba abierta: caminé de puntitas, tratando de no hacer ruido, pero otros fueron los que llamaron mi atención, Harry hablando/gritando y parece que discutiendo con otra persona.

—¡Ah, sí serás terco Edward! —gruñó un chico, me posicioné detrás de la pared, y me atreví a mirar. Vale, bien, esto es incómodo, Luke, el chico con el que me había besado semanas atrás, estaba con Harry —¡Después no digas que no te ayudé!

—¡Ay, cállate! ¿Sí?  —tocó su frente, fatigado, Luke gruñó de nuevo —Es que no sé que hacer, ¿sabes? Jamás me había pasado algo así, aparte, ella es un poco especial...

—¡No es culpa mía, hermano! —alzó los brazos, demostrando inocencia —Tú eres el idiota que se tarda mucho, yo, amigo mío, ya la tendría en mis pies... ¡y látigo, sexo, woah! —cantó bailando, haciendo como si golpeaba un trasero, Harry frunció el ceño y yo traté de no reír —Vamos, ricitos, canta conmigo, ¡y... látigo, sexo, alcohol y drogas!

—Eres idiota —murmuró Harry tocando nuevamente su frente, ahogué una carcajada —Por eso estás soltero, por lo mismo. Ay, mierda, tengo que ir por ella, tengo que ir por Kage, tú quédate aquí.

Corrió rápidamente y chocó conmigo, su ceño fruncido se hizo presente y lo único que pude hacer fue sonreír inocentemente, me había pillado escuchando una conversación ajena. Rayos.

Give me love |Book One.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora