Enamorado de Ti [ADAPT]

Capítulo VIII

-¿Disfrutaste el sábado?

Jimin miró hacia la puerta de su despacho y vio a Jackson. Parecía muy contento y seguro de sí mismo.

Aquello hizo que sospechara y miró hacia la puerta del despacho de Choon para asegurarse de que estuviera cerrada antes de contestar.

-La familia Kim organizó una fiesta maravillosa en tu honor y en el de TaeHyung.

Jackson sonrió, terminó de entrar en el despacho y cerró la puerta.

-Eso no es lo que yo te he preguntado, ¿no crees? -dijo mientras se sentaba en una esquina de su mesa y lo miraba con ojos burlones.

Jimin suspiró.

-No pensé que fuera necesario contestar -le dijo sin prestarle demasiada atención.

Él se encogió de hombros.

-Gracias por el jarrón de cristal y por cierto, Tae escribirá una nota de agradecimiento a cada uno, pero pensé que yo debía agradecértelo en persona.

Jimin sabía que Jungkook había llevado un regalo, pero no que se tratara de un jarrón de cristal.

-Enhorabuena, besos de Kookie y Jiminie -dijo Jackson como si lo estuviera leyendo en una tarjeta-. ¿Cuánto hace que andas con Jeon?

No sabía que JungKook había escrito una nota como aquélla, en aquellos momentos supo por qué lo había hecho, pero debía haberle avisado.

Miró a Wang con frialdad.

-No sé por qué te interesa saber algo así.

-En realidad no me interesa, tú y Jin han logrado bastante si consiguen convencerlo para que los acepten -tenía una expresión de satisfacción que a Jimin le desagradaba-. Debo decir que me has sorprendido, Jiminie, das una falsa impresión de chico inocente.

Lo miró fijamente, ¿acaso estaba bebido? Sólo eran las once y media de la mañana, pero él no lograba entender lo que Jackson le estaba diciendo, nada parecía tener sentido.

Negó con la cabeza, no quería que aquella conversación se prolongara demasiado.

-Lo tendré en cuenta, Jackson. Ahora, si no te importa, he de pedirte que te vayas, tengo mucho trabajo que hacer.

Wang sonrió, pero no se movió.

-¿No te das cuenta, Jiminie? No hace falta que sigas portándote como un chico inocente conmigo. La verdad es que tú y yo nos parecemos más de lo que yo pensaba.

Jimin se puso tenso.

-¡No lo creo!

-Por supuesto que sí -lo contradijo el rubio alto con una sonrisa-. Es una pena que parecieras tan inocente hace dos meses, tú y yo podríamos haber formado un gran equipo. Y Jin también, por supuesto.

Jackson tenía que estar bebido porque él no lograba entender nada de lo que estaba diciendo.

-¿Qué tiene que ver Jin en este asunto? -Jackson y Jin se habían visto un par de veces, pero a su hermano nunca le había gustado y nada parecía haber cambiado desde entonces. Tampoco Jackson había parecido muy interesado en su hermano.

Él sonrió.

-Puedes dejar de fingir, el juego ha terminado. Quizá los tres deberíamos formar un club, podríamos llamarlo...

-Jackson, no sé de qué me estás hablando -le interrumpió-. Además, estás sentado encima de mi mesa y tengo mucho trabajo que hacer, ¿quieres hacer el favor de marcharte?