- ¡¿Que has dicho?! - Dice girandose hacía mi
- eso, es su novia - dije cómo si nada girandome nuevamente hacia el espejo en la cual me veía toda despeinada, últimamente había engordado un poquito a si que comenzaría a hacer dieta.
- ¿Ale que dices? ¿estoy gorda? - dije poniéndome de lado y mirándome mi estomago
- fer ¿estas bien? - murmura Ale todavía en shock
- si, no es para tanto, no van a durar mucho - murmure levantando mis hombros
-¿por qué dices eso? -
- por que no le gustan las huecas como ella - comenze a arreglarme mi cabello
- ¿ósea le gustan como tu? - Dice sonriendo
- no para tanto - sonreí - aún que no está mal esa hueca
Comenze a reír
- si quiere guerra, guerra va a tener - sonreí para mi misma mirándome al espejo
- bien, vamos a clase - Dice Ale empujandome.
-
-
-
- Chao fer - Dice Ale despidiéndose con la mano mientras se subía a la micro
- Chao - sonreí
El día había pasado regularmente, después había visto a Francisco todos los recreos con esa estúpida, ya se por que están juntos, los dos son subdesarrollados y deben entenderse perfectamente.
Comencé a caminar hacia la casa.
¿a si que soy simpática? ¿hablan de mi todo el día? ¿tan popular soy entre ellos? ¡aish! ¿por qué?
Llegue a la casa y ahí estaban los tortolitos agarrándose en el sillón ¿que les pasaba? enserio Francisco se había pasado, yo nunca haría eso ni menos al frente de el.
- ¡que Ascó! - dije en voz alta mientras dejaba mi mochila en el piso y me dirigía a la cocina en busca de jugo
- llegaste - Dice la hueca
- no me digas - dije girandome para mirarla- ahora alejate - hice una pausa - ¡Francisco! ¡saca a esta desconocida de mi casa!
Ella me mira con odio
- esa desconocida es mi novia y está también es mi casa - Dice apareciendo por atrás de la hueca
- dile entonces que no se entrometa en mi camino - pasó por al lado de ellos y me dirijo al sillon para acostarme
Se sentaron en el otro sillón, los dos juntitos
- así que tu eres la hermana - Dice esta sonriendo
- oh! has descubierto América - dije sarcástica - no lo sabía
Francisco comenzó a reír pero la hueca no lo vio
- ¿hace cuanto son hermanos?- Dice mirándome
- hueca ¿te importa? - dije mirándola de arriba a abajo con desaprobación
-por algo pregunto ¿no? - Dice con malicia
- pregúntale a tu novio ¿o eres muy subdesarrollada para no haberte dado cuenta que le podías preguntar a él? -
Ella se pusó de pie, al igual que yo, me agarró mi cabello y comenzó a tomármelo, yo le pegaba y a la vez le tiraba su cabello. Al parecer iba ganando ya que ella tenía el labio roto y estaba mucho más despeinada que yo.